Las cartas de Francisco Ayala sobre

Bryn Mawr

Bryn Mawr College (Pensilvania).

Francisco Ayala fue profesor de esta universidad para mujeres, fundada en 1885, entre 1959 y 1962. Fue fundamental para ello la mediación de José María Ferrater Mora, quien enseñó allí durante la mayor parte de su carrera.

cartas 36 al 40 de 42
FECHA
19/11/1962
REMITENTE
Francisco Ayala
DESTINATARIOS/AS
José M.ª Ferrater Mora
DESTINO
S.l.
ORIGEN
New York University. Graduate School of Arts and Science
FICHA DESCRIPTIVA

[Carta mecanografiada con firma autógrafa y con membrete:] NEW YORK UNIVERSITY / WASHINGTON SQUARE COLLEGE OF ARTS AND SCIENCE / WASHINGTON SQUARE, NEW YORK 3, N.Y. / JUNIOR YEAR IN SPAIN / OFFICE OF THE DIRECTOR / 15 WASHINGTON MEWS

DEPÓSITO DEL ORIGINAL
Fondo “Epistolario del Legado Ferrater Mora”. Universitat de Girona. Cátedra Ferrater Mora de Pensamiento Contemporáneo

Carta de Francisco Ayala a José M.ª Ferrater Mora (19/11/1962)

19 de noviembre de 1962.

Querido José María:

He empezado la semana de Gracias-sean-dadas dedicando a tus escritos mi vigilante atención. En Cuadernos leo tu 'Así que pasen veinte años', y esa lectura me ha proporcionado un rato de placer, tanto por el tratamiento a que sometes el tema como por el tema mismo. Y enseguida, me aplico a repasar las páginas de El ser y la muerte, demorando acá y allá, como hace uno cuando ya conoce los detalles del argumento y se recrea con los pasajes más felices. Ha quedado muy bien el libro, y te felicito de que lo veas por fin en circulación.

Aquí me tienes, trabajando lo menos posible, pero siempre más de lo que fuera justo. Nos abandonó Max Aub en el punto mismo de saturación, y todo resultó por consiguiente bien. Quedó contento de su ida a Bryn Mawr, aunque extrañó que Mario, con cuyo padre tiene él buena amistad, fuera escasamente atento (y esto te lo digo, estrictamente, para inter nos). Supongo que Billy quedaría encantada de que sus alumnas recibieran tan buena lección de fonética castellana como la que nuestro ilustre escritor debió de impartirles.

Et c’est tout! Nuestros cariñosos saludos y un abrazo

Ayala.-


FECHA
29/11/1963
REMITENTE
Francisco Ayala
DESTINATARIOS/AS
Ricardo Gullón
DESTINO
S.l.
ORIGEN
S.l.
FICHA DESCRIPTIVA

[Carta mecanografiada con firma autógrafa y con membrete:] NEW YORK UNIVERSITY / WASHINGTON SQUARE COLLEGE OF ARTS AND SCIENCE / WASHINGTON SQUARE, NEW YORK 3, N.Y. / DEPARTMENT OF SPANISH AND PORTUGUESE

DEPÓSITO DEL ORIGINAL
Harry Ransom Center. The University of Texas at Austin

Carta de Francisco Ayala a Ricardo Gullón (29/11/1963)

29 de noviembre de 1963

Mi querido Ricardo:

Hoy que no han matado, parece, a ningún presidente, ni al asesino del asesino del idem, te escribo, como hace dias tenía gana de hacerlo, y no lo hice por la susodicha razón, que me hace pensar, pobre Kennedy, en la N. de la R. que puso el periódico de Nakens a la noticia de un rayo en una iglesia: “Y aquí, en la redacción de El Motín, sin novedaz”. Allí, en El Pardo, nada. Bueno, qué se le va a hacer. ¡A otra cosa,mariposa!

Leí en su versión castellana tu artículo sobre la novela española moderna, y leí el de Soldevila sobre un servidor, adornado éste (el artículo, digo; no el servidor) con muy abundantes y docorativas [sic] erratas, que al autor lo han de haber puesto frenético, pues aun es muy joven y no sabe que ésa es la gracia, condimento y aliño de todo artículo que se estime. El artículo de Inesita no volví a leerlo, pero la felicito de nuevo por su publicación reiterada.

En este momento está Nina entregada a la lectura de tu estudio aparecido en Universidad de México, y de vez en cuando me lee algún parrafito del bondadoso patriarca ya difunto, lectura que me hará agarrar el número de la revista con ansia loca no bien haya terminado de devorarlo ella.

Ayer estuvieron aquí los Ferrater y los Mora, quienes, aparte devorar, no trabajos literarios, sino un suculento pavo, no suministraron informaciones de interés sobre el difunto Bryn Mawr (difunto para mí, se entiende), salvo acaso la de que el joven Gonzalez, que tanto se distingue por su silencio, oral y epistolar, parece haber abandonado definitivamente la idea que alguna vez acarició de doctorarse, y cambia las solemnes vestiduras académicas por los laureles del poeta y los honrados callos del agricultor, o al menos el sosegado y sonriente reposo del rentista, retirándose al México natal. Es noticia, aunque esperada, no totalmente fidedigna, pues como bien sabes la gente adivina e inventa vidas ajenas con sin igual diligencia. En este caso, es tan verosimil la especie que me resisto a creerla cierta.

Y... eso es todo; pues no te interesará saber que el anciano Zulueta (don Luis de) ha llegado a Manhattan cargado de años para animarnos a perdurar en esta vida a nosotros los muchachos; ni que Nilita Vientós me escribió larga y cariñosa carta; ni que el joven Marañón vino a besarme la mano el otro dia (Jesús, que eufemístico estoy); ni que... Bueno, finis coronat opera, y aun opereta. Escribe copiosamente, con destino a la lectura privada se entiende, dándome cuenta de las escrituras públicas, o destinadas a ser tales en breve tiempo, aunque nunca tanto como el autor de turno (que en este caso lo eres tú) desearía, pues uno quisiera ver publicadas las cosas antes incluso de haberlas escrito.

Saludos, y un abrazo de

Ayala.-


FECHA
09/12/1963
REMITENTE
Francisco Ayala
DESTINATARIOS/AS
Ricardo Gullón
DESTINO
S.l.
ORIGEN
S.l.
FICHA DESCRIPTIVA

[Carta mecanografiada con firma autógrafa y con membrete:] NEW YORK UNIVERSITY / WASHINGTON SQUARE COLLEGE OF ARTS AND SCIENCE / WASHINGTON SQUARE, NEW YORK 3, N.Y. / DEPARTMENT OF SPANISH AND PORTUGUESE

DEPÓSITO DEL ORIGINAL
Harry Ransom Center. The University of Texas at Austin

Carta de Francisco Ayala a Ricardo Gullón (09/12/1963)

9 de diciembre 1963

Mi querido Ricardo:

Ahí va mi respuesta a la consulta confidencial que me haces. Yo creo que no debes excluir a Max Aub. En primer lugar, no hay duda de que pertenece a la generación, en cuanto comenzó escribiendo ‘deshumanizadamente’; en segundo lugar, ha escrito mucho, inclusive muchas novelas, y aunque la cantidad en sí misma no significa gran cosa, algo significa de todos modos, si se dan otros supuestos. Éstos se reducen, claro está, al de una calidad mínima, que tampoco sería justo negarle, aunque las valoraciones oscilen según los criterios y gustos personales. Para mí, las novelas de Max pecan en dos direcciones (y supongo que por esos pecados, y quizás otros, es por lo que a ti no te gustan). Una de las cosas que me hacen a ratos antipática su prosa es el empeño ‘deliberado’ de ser castiza. Sin embargo –y esto explicaría lo deliberado del empeño– no puede evitar, aunque muy de vez en cuando, el galicismo de construcción, que sería en ella como en su expresión oral el acento. Pero, así como éste es clamoroso, para detectar el galicismo en su prosa hay que tener el oido muy fino. Otra cosa que no me gusta en sus novelas es que están escritas un poco ‘a lo que salga’, pero ¿quien puede hacer demasiado hincapie en ese reproche, cuando hoy cree la gente que escribir es como mear o, según la cantidad de materia, cagar? ¿Cuantos novelistas se preocupan de dar una estructura a su composición, lógrenlo o no? Resulta, en lo que se refiere a sus novelas de la guerra, que lo que a Max le sale es lo primero que lleva adentro, o sea la visión combatiente, según la cual los caracteres son buenos o malos según su posición política, lo cual es falso en un plano superficial, aunque llevando las cosas a un plano más profundo pudiera no serlo tanto.

Me doy cuenta de que además, aunque esto no lo dices, te aterra un poco la enorme balumba de letra impresa que pesa sobre las seis letras de su firma. Pero quizás eso mismo –y ahí te brindo la solución ecléctica que buscas– te da una buena razón para seleccionar en cada género lo que está más logrado, y presentarlo en su aspecto mejor, haciéndole gracia de sus menos felices momentos. Nadie va a pretender que a autor tan copioso lo estudies en su totalidad, y ya está bien juzgarlo por lo mejor que ha producido, sobre todo cuando, como es el caso, se trata de un autor-pulpo, cuya producción carece de estructura interna y de verdadera evolución, o al menos, así me parece a mí.

A Eugenio le mandé una lista de personas, encabezada con tu nombre, a quien quería que remitieran El problema del... Me dice haber dado orden y quiero creerlo. Si todavía no lo ha hecho, yo te enviaré uno de los 5 ejemplares que me remitió a mí (por contrato me corresponden más, de manera que es otra razón para que haya cumplido mi encargo).

Con Emilio Gz. Lz. mis relaciones son más bien frias. De todos modos,lo llamaré para lo de Arocena. Ni en Princeton ni en Bryn Mawr tienen cursos de verano. Si lo que Arocena quiere es quedarse en este pais, y enseñar literatura, que lo diga claramente, y le buscaríamos sitio.

Saludos, y un abrazo

Ayala.-


FECHA
04/02/1964
REMITENTE
Francisco Ayala
DESTINATARIOS/AS
Max Aub
DESTINO
S.l.
ORIGEN
S.l.
FICHA DESCRIPTIVA

[Carta mecanografiada con firma autógrafa]

DEPÓSITO DEL ORIGINAL
Fundación Max Aub

Carta de Francisco Ayala a Max Aub (04/02/1964)

4 de febrero 1964

Querido Max:

No he contestado a tu carta de hace un mes, esperando a ver si llegaba el número de la Revista de la Universidad y el anunciado chequecito; pero ni uno ni otro se han hecho presentes. Dime, por favor, quien es la persona que se ocupa de la revista, para que le escriba. Me gustaría recibirla regularmente. Ocúpate, ¿quieres? Creo que bastaría con que telefonées para que la persona en cuestión me escriba remitiéndome los susodichos pertrechos.

Como veo que te gustó mi “Baile de máscaras”, te remito otra cosa que acabo de escribir en la misma vena (es decir, en la vena de lo casi impublicable) para que me digas qué te parece, y si ves dónde “encajarlo”, lo hagas.

Por ahora no vamos a Puerto Rico, donde, en efecto, está Guillén; pero yo no podría moverme de aquí, pues voy a dejar el puesto de Bryn Mawr para cambiarme a la Universidad de Nueva York, y por eso mismo no quiero quedar mal allá y que piensen que, porque me voy, abuso; de modo que… esclavo del deber. Ya será en el verano.

Os felicitamos por el noveno nieto. Seguid así, y pronto completareis una cifra redonda.

¿Podrás creer que todavía la cerda de Ilsa Barea no ha entregado la traducción de mi libro? Hasta en eso de portarse mal hay sus categorías.

Termino, con el consabido abrazo.

Ayala.-


FECHA
01/02/1967
REMITENTE
Ricardo Gullón
DESTINATARIOS/AS
Francisco Ayala
DESTINO
University of Chicago. Department of Romance Languages and Literatures.
ORIGEN
S.l.
FICHA DESCRIPTIVA

[Carta mecanografiada]

DEPÓSITO DEL ORIGINAL
Harry Ransom Center. The University of Texas at Austin

Carta de Ricardo Gullón a Francisco Ayala (01/02/1967)

1 de febrero de 1967

Professor Francisco Ayala

Department of Romance Languages

University of Chicago

1050 East 59th Street

Chicago, Illinois 60637

Mi querido Paco:

No has recibido ya las grabaciones de los dos últimos días de conversaciones, porque aun no acabaron de ponerlas a máquina. De todas maneras, no creo te sirvan de mucho; en definitiva, como tú ya indicabas, no tendrás más remedio que rehacerlo todo. Siempre hay que hacer eso cuando no se ha escrito la conferencia de antemano; por eso antes de ir a Los Angeles redacté el reóforo que allí tenía que soltar.

El susodicho reóforo se lo había ofrecido a Nilita para el número que Asomante dedicará a Rubén Darío, y ya se lo he enviado. Ahora estoy metido en disquisiciones sobre el esperpento valleinclanesco, para las discusiones de Bryn Mawr. Ayer empecé, y he seguido esta mañana, un borrador, pues así podré utilizarlo luego para cumplir con algún compromiso de los varios pendientes. También publicaré lo que leí en Nueva York; Ernesto Mejías me indicó que lo mandara a la Revista de la Universidad de México, cosa que voy a hacer, aunque no estoy seguro de que encaje en la nueva dirección de esta revista. A Canito no quiero ponerle en el compromiso de que le peguen un golpe por mi culpa, pero en España sería donde más me gustaría que se leyera.

Me enseñaste en tu casa la traducción alemana de España a la fecha; precioso librito; en cambio no vi el número de octubre de Cuadernos para el Dialógo en donde figura el prólogo a la versión alemana.

La idea del antólogo holandés, seleccionando “Un baile de máscaras” me ha divertido y no me parece mal. Sí me hace pensar en que auizá [sic] considere que las malas costumbres que tú describes, son lo que caracteriza a nuestra amada patria, cosa un tanto exagerada. De todas maneras, las narraciones de este tipo deben parecer a los extranjeros la quintaesencia del “hispanic realism”.

Aparte de ese par de pequeñeces para Los Angeles y para Filadelfia no he hecho nada digno de mención en lo que va de mes, pero sí he leído unos cuarenta papers que me han llevado mucho más tiempo del que puedes imaginarte. Ahora tengo un hueco y trato de aprovecharlo para poner en planta el curso graduado del semestre próximo, que empieza el lunes 6.

Agnes me encargó que te trasmitiera sus recuerdos y Javier me ha preguntado cómo estás y qué estás haciendo.

Cumplo los encargos y vaya con ellos un abrazo muy fuerte de

Ricardo Gullón

RG/lwc