Correspondencia con Ricardo Gullón:

Ricardo Gullón

1908 Astorga, León - 1991 Madrid

Licenciado en Derecho por la Universidad de Madrid en 1929, fundó con Ildefonso Manuel Gil la revista Literatura (1934). Alternó la docencia en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo con la práctica jurídica, tras una depuración de treinta meses por colaboración con el ejército republicano. 


En 1953 viajó a Puerto Rico, donde permaneció durante tres años. También enseñó Literatura Española en las universidades de Columbia, Chicago y Texas en Austin, entre otras. Ayala le dedica un capítulo de Recuerdos y olvidos.

cartas 1 al 5 de 166
FECHA
12/12/1959
REMITENTE
Francisco Ayala
DESTINATARIOS/AS
Ricardo Gullón
DESTINO
S.l.
ORIGEN
S.l.
FICHA DESCRIPTIVA

[Carta mecanografiada con firma autógrafa y con membrete:] RUTGERS, THE STATE UNIVERSITY / COLLEGE OF ARTS AND SCIENCES / NEW BRUNSWICK, NEW JERSEY

DEPÓSITO DEL ORIGINAL
Harry Ransom Center. The University of Texas at Austin

Carta de Francisco Ayala a Ricardo Gullón (12/12/1959)

12 de diciembre de 1959

Querido Ricardo:

He tardado unos cuantos dias en contestarte, porque estos últimos, y las semanas que su suma compne[sic], han sido tremendos para mí de trabajo estúpido, es decir, de panem lucrando, sin que me haya quedado tiempo ni para respirar. Y ahora, con las vacaciones a la vista, demasiado breves, ay, y con perspectiva de otros ajetreos, lo primero que hago es ponerte estas lineas, y desearse las clásicas felicidades pascuales y perspectivas de prosperidad para el año entrante.

Quiero decirte también que he recomendado tu nombre para un puesto, una cátedra nueva de literatura española, no mal dotada, indicando que tienes de una oferta de Texas, de manera que deben de apresurarse, si les conviene, a entablar contacto contigo. Nunca está de más poder elegir entre varias posibilidades; eso, por lo menos, sirve para elevar la cotización. No estoy seguro de que vayan a escribirte, pero tal vez lo hagan; en cuyo caso, ya sabes: el mínimo que debes aceptar es de $ 10.000.- Si quieres más detalles, te los daré.

Ya veo que las majaderías continúan ahí. No hay que irritarse; ése es el mal endémico. Esa Berta Singerman es siempre la misma que yo oía de chico en Madrid? O se trata de alguna nietecilla suya.

Recibí un paquete de Jaspers, pero ya me parece que hay mala leche en quien hace los paquetes, pues vinieron un solo tomo primero y cuatro segundos. Le escribiré a Fernández sobre ello.

No te escribo más hoy: pero no quiero dejar pasar una fecha más sin hacerlo. Recibe un gran abrazo de tu amigo.

Paco.- 


FECHA
21/12/1959
REMITENTE
Ricardo Gullón
DESTINATARIOS/AS
Francisco Ayala
DESTINO
54 West 16th Street. Apt. 4F. New York 11 N. Y.
ORIGEN
S.l.
FICHA DESCRIPTIVA

[Carta mecanografiada]

DEPÓSITO DEL ORIGINAL
Harry Ransom Center. The University of Texas at Austin

Carta de Ricardo Gullón a Francisco Ayala (21/12/1959)

21 de diciembre de 1959

Sr. D. Francisco Ayala

54 West 16 Street.

New York, N. Y.

Querido Paco:

Contesto tu carta para agradecerte tu recomendación para la nueva catédra de literatura española que según tú yo podría desempeñar. No he tenido carta oficial a ese respecto y por otra parte ya he decidido aceptar la oferta de Tejas que económicamente es muy favorable y donde además me han ofrecido secretaria y facilidades de trabajo que me permitirán seguir funcionando como hasta la fecha.

Terminé algunas de las cosas en que estaba empeñado, entre ellas dos extensos reóforos juanramonianos que se publicarán en España y en Buenos Aires. Ha sido milagroso que los concluyera pues en realidad estoy atravesando un período de indiferencia absoluta hacía la letra hablada o impresa y nada me importa nada. Sigo trabajando, por la velocidad adquirida y suponiendo que porque soy lo bastante estúpido para dejarme acosar todavía por esa antigualla que llaman “conciencia del deber”. Eso revela, dada la edad, que mi majadería es incurable.

Deseo que tengaís muy Felices Pascuas y que el próximo año venga para tí repleto de cosas buenas. Que sí vendrá, pues estás en el buen camino y además, en tu caso, todas las circunstancias son favorables.

Esa Berta Singerman que estuvo aquí no se trata como sospechas de alguna nietecilla de aquella de quien oísteis hablar en Madrid, cuando niño. Mas bien creo que debe ser se abuela pues es una anciana respetable, aunque reteñida. Tiene marido y todo, y su paso por aquí se marcó por algunos chismes de escasa inventiva y mala gracia.

Entramos en las Navidades con trullas y jaranas. Nos amenazan reuniones a granel, de manera que, unido a otras delicias, escuso [sic] decirte cómo se presenta la temporada.

Lo que me dices de los paquetes con el libros [sic] de Jaspers no me sorprende. Creo que hay “mano oculta” tras todas esas torpezas.

Para Nina y para tí un abrazo muy afectuoso de

Ricardo Gullón 


FECHA
10/02/1960
REMITENTE
Francisco Ayala
DESTINATARIOS/AS
Ricardo Gullón
DESTINO
S.l.
ORIGEN
S.l.
FICHA DESCRIPTIVA

[Carta mecanografiada con correcciones a mano, firma autógrafa y membrete:] BRYN MAWR COLLEGE / BRYN MAWR, PENNSYLVANIA / DEPARTMENT OF SPANISH

DEPÓSITO DEL ORIGINAL
Harry Ransom Center. The University of Texas at Austin

Carta de Francisco Ayala a Ricardo Gullón (10/02/1960)

10 de febrero 1960

Mi querido Ricardo:

Llegó, que todo llega en este mundo, el número de La Torre con las cartas cruzadas entre Juan Ramón y Zenobia. Las he leído con enorme interés. ¡Cómo se dibujan las respectivas personalidades desde el comienzo! Tu estudio de introducción es –no habría que decirlo- excelente y, desde luego, oportuno. Creo que en relación con esas cartas no se plantea el problema que con otros papeles del poeta, puesto que él las escribió pensando en la publicidad y en la inmortalidad y en el monumento; y esto es lo que, à son insu, les da enorme interés. La actitud es la misma que tuvo respecto de la creación poética. Vivía, si a eso puede llamársele vivir, en función de ella; y el sublime farsante lo hacía todo con vistas a la extrapolación estética. El resultado, paradójicamente, era rebajar el valor estético de sus perlas artificiales. ¡Qué contraste con la poesía de Machado, a quien le brotaban sin buscarlo ni procurarlo las perlas naturales de su verso como excrecencia del vivir! Por cierto, para Machado hubiera sido afrentoso y terrible el hecho de que sus cartas a Guiomar alcanzaron al público, y aun a tercera persona, aunque ésta lo hubiera sido en verdad, y no la vieja alcahueta de doña Concha Espina. Pero es que él era un hombre, y tenía sindéresis. Por eso, paradójicamente también, interesan más sus cartas: uno sabe que no estaban marcadas.

Lo que ocurrió con Delaware es que el Sr. Roberts estuvo en la convención de Chicago, y allí se encontró con Martinez López, quien dejó saber que ya estabas tú comprometidos con ellos. Seguramente desistió, entonces, el otro de escribirte. Por cierto que el dicho Martínez pasó por aquí con la familia hace unos dias, de camino para España, y estuvimos juntos unas horas durante las cuales, cómo no, te recordamos con el cariño que mereces.

El pobre Molina está preocupadísimo con su artículo. El tiene justificadas suspicacias; digo, justificadas en general, no en en este caso específico, pues seguramente no se da cuenta de que las resistencias que halla su excelente estudio no se deben (si son intencionadas y no resultado de la necedad ambiente, como bien pudiera ocurrir) a que mi libro ha tenido ya demasiado éxito, y eso despierta la envidia de gentes que sólo creen puede reconocerse a un escritor a condición de que se haya muerto previamente, o al menos de que esté muerto en algún modo, y no inquiete, ni moleste, ni diga cosas desagradables. Dado que yo no pienso en morirme por ahora, ni menos dejar de escribir con punta, pues de otro modo no me tomaría el trabajo, ciertos elementos prefieren, consciente o inconscientemente, silenciarme. Por suerte, hay otra gente, y al parecer no demasiado escasa, que tiene la magnanimidad bastante para decir lo que piensa cuando piensa bien de algo: y me refiero en particular ahora a Rodríguez Alcalá, que no contento con su magnífico artículo de Cuadernos Americanos, ha publicado otro, muy generoso, en el último número de la Revista Hispánica Moderna, donde, por cierto, cita tu nombre. Quizás lo habrás visto. Volviendo a Rodrigo, me dijo que tú vas a enviar su trabajo a los Papeles de Cela. Puedes creerme si te digo que me alegraré de que se lo publiquen, más que por mí mismo, por él. Necesita absolutamente esa confortación.

Recibí de Jorge una carta, muy contento con su nuevo puesto como ayudante del Rector. Lo felicité, aunque sería al Rector a quien habría que felicitar.

No dejes de escribirme, y pronto. Déjame conocer tus planes conforme se concreten. Los nuestros consisten en volar hacia España directamente en los últimos dias de mayo o primeros de junio; estar unos pocos en Madrid, y luego ir a Andalucía, y ver un poco aquello. En julio, probablemente, ir a Berlín, donde me han invitado a dar unas clases; en agosto a Inglaterra, y en septiembre, según estemos, y según hayan ido las cosas, se verá que se hace. Todo está aún, como ves, bastante elástico, salvo acaso el proyecto de colar directamente a España, y aun éste pudiera tener variantes todavía.

Saludos muy afectuosos a todos los amigos, y para ti un gran abrazo de

Ayala.-


FECHA
16/02/1960
REMITENTE
Ricardo Gullón
DESTINATARIOS/AS
Francisco Ayala
DESTINO
54 West 16th Street. Apt. 4F. New York 11 N. Y.
ORIGEN
S.l.
FICHA DESCRIPTIVA

[Carta mecanografiada]

DEPÓSITO DEL ORIGINAL
Harry Ransom Center. The University of Texas at Austin

Carta de Ricardo Gullón a Francisco Ayala (16/02/1960)

16 de febrero de 1960

Sr. D. Francisco Ayala

54 West 16 Street.

New York, N. Y.

Querido Paco:

Contesto en seguida tu carta del día 10 pues, como siempre, me alegró recibirla ya que trasluce una buena salud espiritual y un equilibrio intelectual que para mí quisiera. Me conforta especialmente que te hayan interesado las cartas de Zenobia y Juan Ramón Jiménez, pues no estaba seguro de si a todo el mundo le iban a resultar tan apasionantes como a mi. A mi juicio Zenobia sale engrandecida de esta correspondencia, y su clarividencia aun destacaría más si pudiéramos publicar algunas cartas más íntimas y directas que por el momento ha parecido discreto dejar inéditas. No olvides que la familia del poeta está llena de prejuicios y suspicacias y el sobrino de Juan Ramón acaba de publicar un artículo en el que supone que estamos tramando una conjura contra él y contra Dios sabe quien.

De Rodrigo hace tiempo que no tengo noticias y no sé si por fin ha reclamado su artículo a Eugenio Fernández Méndez. Yo creo que este lo publicará en uno de los próximos números, pues no tiene nada contra su autor ni contra ti. Basta que piense que la misma suerte que su ensayo corrieron los de Da Cal, Salazar Chapela, Rodriguez Luis y hasta las cartas de Gabriela Mistral. No fué, creo yo, sino un deseo de hacer de otra manera lo que yo había hecho, para mostrar que la rectificación podía mejorar el número en proyecto. En este caso puede estar seguro Rodrigo de que nada hay contra él.

Escribí un artículo largo sobre la novela para el número especial que Texas Quarterly va a dedicar a España. En él te encontrarás repetidamente citado y elogiado Muertes de perro. Estoy deseando ver el otro artículo de Rodriguez Alcalá, en la Revista Hispánica Moderna. El enviado a Insula aparece en el número de febrero, si bien debo confesarte que hube de ponerme muy serio con Cano para que se decidiera a darlo, ya que alegaba que la obra habiendo sido comentada por él no necesitaba más complementos críticos. Con relación a Insula habrá visto Rodrigo que insertaron en lugar preferente su artículo sobre Machado, en el número especial que acaban de dedicar al gran poeta.

Temo que no podamos vernos esta primavera o a comienzos del verano. Pienso ir a Middlebury en los últimos días de junio, deteniéndome un poco de tiempo en Nueva York. Volaré a España el 17 de agosto y regresaré a Tejas el 10 de septiembre, pero ya sin escala en Nueva York, o con escala de horas. Dado tu plan de viaje, no sé cómo podríamos coincidir en algún sitio.

Aurorita y Jorge te recuerdan siempre con mucho cariño. Los tres hablamos de ti con frecuencia y más de una vez lamentamos no tenerte a nuestro lado.

Un gran abrazo


FECHA
12/03/1960
REMITENTE
Francisco Ayala
DESTINATARIOS/AS
Ricardo Gullón
DESTINO
S.l.
ORIGEN
S.l.
FICHA DESCRIPTIVA

[Carta mecanografiada con firma autógrafa y con membrete:] BRYN MAWR COLLEGE / BRYN MAWR, PENNSYLVANIA / DEPARTMENT OF SPANISH

DEPÓSITO DEL ORIGINAL
Harry Ransom Center. The University of Texas at Austin

Carta de Francisco Ayala a Ricardo Gullón (12/03/1960)

12 de marzo 1960

Mi querido Ricardo:

He dejado pasar varios dias, o ya semanas, sin contestar a tu carta, porque el mucho trabajo, los viajes semanales y, para que nada falta, los resfrios propios de la temporada, me han tenido, cuando no sin ganas, sin tiempo. Hoy lo encuentro, y te escribo estas lineas.

En mis clases, he dedicado últimamente bastante atención a la poesía de J. R. J. y, como puedes figurarte, he usado mucho los materiales que tú estás haciendo accesibles acerca de él. También he “usado” a propósito de Machado.

Rodrigo, con quien acabo de hablar por teléfono, está muy contento con el lugar destacado que han dado a su artículo de Insula. Ya veo cuanta mano has tenido –aparte de tu propia colaboración– en ese número. Queda estupendo, a decir verdad. Por cierto que me ha llamado la atención lo que dice J. L. Cano al mencionarme en su crítica sobre Serrano: por lo visto, él ignora que mi primero y segundo libro son sendas novelas, a las que siguieron varias novelas cortas, sepultadas hoy en la Rev. De Occidente, que después de todo no es mal mausoleo. Todo esto me hace pensar en que quizás convenga publicar un volumen con mis novelas cortas, para que aparezca cuando salga la –más larga que estoy escribiendo ahora, y sobre cuyo posible título quisiera consultarte, para ver qué te parece prima facies; a saber: La Gran Vidorra, o Bocanegra Reivindicado; o viceversa; o sólo uno de ambos.

Ya me anunció Cano que en febrero saldrá el artículo de la Sra. Maslow. Te imaginarás cuánto te agradezco lo que hiciste en el asunto. Lo peor de la situación literaria española es que, aun entre las mejores gentes, se ha perdido el sentido de las proporciones, y todo es equivalente a todo, de modo que sólo la amistad funciona; esto es maravilloso es un sentido, pero funesto en otro. Debo confesarte que no sé si me atrae más, o me asustas más, la perspectiva de la proyectada visita a nuestro desdichado pais.

¿Cuando sale el Texas Quarterly? Tengo impaciencia por conocer tu artículo; y como todo tarda tanto, te agradecería que, si tienes una copia, me la envies. Te la devolvería, si la necesitas.

Veo por lo que me dices que no vamos a coincidir en ninguna parte por no sé cuanto tiempo, a menos que, habiéndome gustado la ida a España, resuelva darme una segunda vuelta en septiembre por Madrid, y allí nos viéramos antes de tu salida para Texas. De no se así, tendrías que invitarme a dar una conferencia en dicha universidad durante el curso, para que pasáramos juntos siquiera un fin de semana.

Y nada más por hoy, sino un grande abrazo de

Paco.-