Carta de Francisco Ayala a Vicente Llorens (13/05/1957)
13 de mayo de 1957.
Querido Vicente: A vuelta de correo te contesto, pues me
encuentro sumido en el clásico “mar de confusiones”, y necesito que me aclares
varios puntos para resolver. El caso es, como decía en mi anterior, que Muñoz
Amato está empeñado en que yo me vaya a dirigir una sección nueva en su
facultad, con vistas a otras cosas inmediatas, pues parece que va a ser él
quien asuma la secretaría de Instrucción. Me ofrece un sueldo bastante alto, y
otras perspectivas apetecibles; pero tú sabes que a mí el dinero no me importa
más de lo debido, y no me importaría ahora perder en sueldo, con tal de estar cerca
de nuestra hija y demás circunstancias que ya sabes. Por consiguiente,
aceptaría incluso ir para el primer semestre a Princeton, en la esperanza de
que, como me sugirió Willis, pudieran darme una cantidad suplementaria, con
pretexto de viaje o lo que fuere, para elevar a $5.000 la cantidad a percibir
en el semestre.
Otro punto me resulta dudoso: al hablar de que se me pagaría tu
sueldo, me pregunto yo si es que el fondo de que me pagaron la vez pasada, y
con el que se contaba, si no entendí mal, cuando me escribiste a la India, no
está ya disponible, o si es que lo reservan para el segundo semestre. Eso me
resulta interesante, para saber si tendría que hacer la composición de lugar
para el año entero, o sólo para un semestre, y según sean las cosas, barajar otras
posibilidades que tengo a la vista.
De todas maneras, me convendría recibir cuanto antes
(pues no quiero comprometerme a nada aquí sin haber resuelto eso, y me están
apremiando) una proposición o invitación formal, reducida en cualquier caso al primer
semestre, y sólo a él, con indicación de fecha inicial del curso, de modo
que pueda pedir yo una licencia limitada, que luego, si acaso, se podría
ampliar. Te ruego, pues, que si las cosas marchan como esperas, y tan pronto
como ello ocurra, me escriban en tal sentido.
Entre tanto, no conviene que este asunto salga de entre
nosotros, pues la noticias vuelan, y no quisiera que se pensara en una
conspiración.
Hoy esperaba carta de Nina, con quien me anuncias que ibas a
cenar el dia 10 pasado. Pero aún no han repartido el correo, y no quiero
demorar la salida de ésta. Por lo tanto, la echo al correo sin esperar más.
Todo lo que haya de hacer en el futuro inmediato, inclusive la vuelta que deseo
darme por ahí, está pendiente de tu respuesta. Como aquí están preparando el
presupuesto, tampoco podría irme, ni aún por breves dias, sin haber dado una
respuesta a las proposiciones que me hacen.
Y ya podrás imaginarte cuánto deseo ir a Nueva York. Parece
que lo del muchacho va mejor, pero de cualquier modo...
Cariñosos saludos de Nina, y un gran abrazo de
Paco.-