Las cartas de Francisco Ayala sobre

Damián Bayón

Damián Bayón. Buenos Aires, 1915-París, 1995.

Historiador y crítico de arte, escritor y profesor, conoció a Francisco Ayala en Buenos Aires, en 1946, durante el velatorio de Pedro Henríquez Ureña.


Por mediación de Ayala fue profesor invitado en la Universidad de Puerto Rico entre 1954 y 1958. Vivió en París en diferentes periodos y allí se doctoró por la Sorbona en 1964. Acompañó a Francisco Ayala en su primer viaje de regreso a España en 1960. Existe una edición anotada de la correspondencia entre Ayala y Bayón.

cartas 6 al 9 de 9
FECHA
02/10/1960
REMITENTE
Francisco Ayala
DESTINATARIOS/AS
Ricardo Gullón
DESTINO
S.l.
ORIGEN
Nueva York
FICHA DESCRIPTIVA

[Carta mecanografiada con firma autógrafa]

DEPÓSITO DEL ORIGINAL
Harry Ransom Center. The University of Texas at Austin

Carta de Francisco Ayala a Ricardo Gullón (02/10/1960)

N.Y., 2 de octubre de 1960.

Querido Ricardo:

Por el joven González he sabido de tus pasos en la tierra texana, e incluso de tus propósitos de escribirme, que ahora espero se cumplan con la debida amplitud, una vez que, reintegrado a la vida sedentaria, o semi-tal, tengo una dirección fija (o dos), que excluyen todo pretexto para el silencio epistolar. Yo tampoco te había escrito a tí por no saber dónde estabas. Lástima grande que tengamos que reducirnos a las limitaciones de la letra escrita, en lugar de poder expandirnos en la libre conversación que permitiría un intercambio de impresiones, noticias, etc., adecuado al volúmen de experiencia (como en ocasión memorable dijo el sabio amigo Recaséns Siches) realizada y acumulada en estos últimos meses. De España habría tanto que hablar, que más bien renuncio. Me he encontrado las cosas distintas de lo que pensaba, y no desde luego mejores que la imagen que me pintaba de ellas. En lo que hay de mejoría (eliminación de molestias policiacas externas) reside la posibilidad de reparar en el mal profundo, que está en la actitud, diversa en sus manifestaciones, pero concurrente en lo esencial, que tienen las gentes frente al régimen, y frente al mundo en general. Para resumirte mi impresión en una sola palabra: “deprimente”. Y en cuanto a las perspectivas... no hablemos. La República del Congo ofrece un modelo de lo que está preparando Franco para el dia remotísimo en que Dios quiera acordarse de él.

En Madrid me encontré con algunos de los viejos amigos, y con otros nuevos (Laín, Ridruejo, y demás). Vi mucha, mucha gente. Entre ella, a Angel Ferrán, a quien visitamos en su casa acompañados de Bayón; y naturalmente,se habló de tí. Estuve también mucho con Jorge Campos, a quien encontré muy simpático. Taurus me va a publicar ahora un libro de ensayos y estudios literarios (todos los cuales, o casi, conoces tú perfectamente), y Aguilar va a hacer un tomo con todas mis novelas cortas, desde la época de Revista de Occidente hasta hoy. Esos son los dos únicos arreglos editoriales que he hecho allí durante aquellos dias. En Andalucía, de la que solo conocía mi Granada natal, reencontrada después de cuarenta años justos (qué barbaridad), Sevilla me fascinó; y me hubiera encantado el paisaje de la llamada costa del sol si hubiera podido levantar la vista de los cráteres que adornan la carretera, como por lo demás todas las de ese desdichado pais. Para qué voy a contarte la clase de emociones que me aguardaban en las piedras, árboles y aguas de Granada. Esto, que es el pasado, y convencerme de que España entera es también un pasado irrevocable, es lo que he sacado, como principal cosecha, de mi viaje. Estoy muy contento de haberlo hecho. Cuánto me gustaría que pudiéramos charlar de todo!

El resto del viaje, por toda Europa occidental, incluso Inglaterra (buen contraste todo ello –incluso Inglaterra, tan “vieja” en muchos aspectos– con la famosa piel de toro) fue agradable, llovido, cansado...

Y aquí me tienes de nuevo, trabajando de nuevo, tanto en lo profesional como en lo gustoso, es decir, en el cultivo de las letras, que es un entretenimiento inocente y barato.

De Puerto Rico he tenido noticias diversas, y en gran parte tristes. Ya había sabido meses ha la desgracia del pobre Manolín, y puedes creer que me afligió de veras. Ahora me dice Benitez, quien estuvo aquí en la semana pasada, que se ha quedado inhabilitado definitivamente. Y además, que Fernández Méndez se encuentra “mentalmente” enfermo, cosa que también había llegado a mis oidos por otros conductos puertorriqueños. Eso explica retrospectivamente algunas rarezas y anomalias de las que uno había podido darse cuenta atribuyéndolas a meros defectos de carácter. La muerte de Marrero es otra mala noticia; y no sé si es buena, que lo ha sucedido en el puesto la pelirroja Esther Rios. Los incesantes embarazos de Brunhilda, que desde algún punto de vista merecerán plácemes, perjudican tanto a la revista La Torre, de la que es directora y única responsable, como al problema poblacional de la Isla de la Simpatía; que –otra noticia– volverá a contar desde enero, si no hay novedad, con las luces filosóficas del gran Carpio. Bueno, majo, no podrás quejarte de laconismo por parte mia. Corresponde en forma debida, y serás recompensado con dilatadas respuestas.

Entre tanto, recibe un fuerte abrazo de

Ayala.-


FECHA
06/01/1965
REMITENTE
Jaime Benítez
DESTINATARIOS/AS
Francisco Ayala
DESTINO
54 West 16th Street. Apt. 4F. New York 11 N. Y.
ORIGEN
S.l.
FICHA DESCRIPTIVA

[Carta mecanografiada con correcciones a mano]

DEPÓSITO DEL ORIGINAL
Fondo Jaime Benítez. Universidad de Puerto Rico

Carta de Jaime Benítez a Francisco Ayala (06/01/1965)

6 de enero de 1965

Sr. Francisco Ayala

54 West 16th Street (apt 4-F)

New York City, N.Y.

Estimado Ayala:

Esta tarde ramoneando en mi biblioteca dí con su artículo en Panorama de octubre de 1963, “Entre el Silencia y la Trivialidad”. Lulú y yo lo hemos releído, no como hacía con toda publicación clásica o inédita un memorable amigo común sino en realidad de nuevo, in toto y con aprobación suma cum laude. Salvo por la parte que me toca, excluída según manda la Santa Madre Iglesia de nuestros comentarios, resulta más aplicable que nunca a Puerto Rico ahora que estamos en franco progreso del programa de hispanoamericanización.

Nos encontramos igual que hace diez años, en el fragor de “la última de las grandes batallas”, con la peculiaridad de que ahora según verá por el boletín que le incluyo, me he propuesto hacer una Escuela de Arquitectura como fin de fiesta y además a la Escuela añadiré, por complacerles doblemente, “la dama de algún amigo que para casarse esté”. Doña Ana de Pantoja resulta ser en este caso un programa graduado de Planificación, favorecido por cuenta propia por la Junta de idem, con la cual me encuentro ahora trabado en descomunal batalla. Porque es el caso que dicho organismo anunció públicamente que hasta tanto la Legislatura no aprobase la reforma no recomendaría fondos para nuevas construcciones.

No ha estado ajena de mi idea sobre la Escuela de Arquitectura la posibilidad de que la joven Nina, con su amante esposo como dicen las canciones navideñas que dentro de una semana terminan, regrese a enseñar en la Universidad y que ello posibilite la reincorporación de usted a la institución de la que en ningún momento ha debido ausentarse.

Le envío copia de mi reciente discurso en Salamanca, donde en adición al texto oficial, hice interpolaciones abundantes que, para sorpresa de Jorge Enjuto, no produjeron ni la guardia civil, ni siquiera un enarcamiento de cejas. Antes por el contrario, recibí afectuosos y conmovedores expresiones de aprecio.

La casa de usted en España es efectivamente un palacio digno de los dueños del mejor champán de Europa. Entre las pocas cosas que pudiera llegar a envidiar algún día, su piso en el Marqués de Cubas pudiera formar número. Debo decirle por otra parte que nosotros también tenemos casa propia, verdad es que de cristal y casi de papel, trepada en la montaña de Jájome Alto, “al aire eljubón de raso, cercano el Emperador”. Recordará usted el verso de Bayón, cuyo Emperador como decían del otro nuestro, es primero de España y quinto de Alemania.

Un abrazo cordial de,

Jaime Benítez

Anejos 2


FECHA
03/10/1966
REMITENTE
Francisco Ayala
DESTINATARIOS/AS
Jaime Benítez
DESTINO
S.l.
ORIGEN
S.l.
FICHA DESCRIPTIVA

[Carta mecanografiada con firma autógrafa y con membrete:] THE UNIVERSITY OF CHICAGO / CHICAGO. ILLINOIS 60637 / DEPARTMENT OF ROMANCE LANGUAGES AND LITERATURES / 1050 EAST 59TH STREET

DEPÓSITO DEL ORIGINAL
Fondo Jaime Benítez. Universidad de Puerto Rico

Carta de Francisco Ayala a Jaime Benítez (03/10/1966)

3 de octubre de 1966

Querido Jaime:

Aquí me tiene desde hace un par de dias. Hasta ahora, sólo he gustado los aspectos buenos de mi nuevo empleo: los cheques, una invitación muy simpática del presidente de la universidad, y un tiempo agradabilísimo que el susodicho presidente me asegura –y no puedo dudar de su seriedad– que es siempre igual en esta ciudad. Pero mañana empiezo mis clases. Y antes de que empiecen quiero cumplir la promesa que le hice a un sobrino mio, Pedro Silva, de escribirle a usted para ver si puede arreglársele una situación en Puerto Rico, donde le gustaría criar a sus hijos para que no hablen el español como gringos, ya que el inglés lo tiene asegurado por el lado materno. Yo creo que usted conoció en una ocasión a este muchacho en casa, y se acordará quizás de un escultor barbudo que había venido a perfeccionar su arte y contrajo justas nupcias, quedándose aquí for ever. Además de las esculturas en piedra, metal y demás medios, domina varias técnicas artesanales conectadas con su arte, tales como fundir y vaciar (pues, de hecho, vive, no tanto de las esculturas que vende, aunque vende algunas, como del ejercicio de esas artesanías). Y me parece a mí que sería de utilidad en cualquiera de las escuelas de esa institución donde podría enseñar sus técnicas. Yo le agradecería mucho a usted que vea si hay alguna perspectiva de conseguir su deseo. Puedo garantizarle a usted que es persona seria y honesta, y no el tipo de “genios” cuya genialidad consiste en dar disgustos al prójimo. En fin, estoy seguro de que se alegrarían de incorporarlo a su ambiente. Sin duda ha sido oírnos hablar con entusiasmo de la Isla de la Simpatía lo que le ha dado deseos de irse a ella. No deje de hacer algo.

El mismo dia de irse ustedes llegó Damián, y sintió muchísimo el desencuentro. Ha estado varios dias en Manhattan devorando exposiciones y museos, aparte de otros manjares deliciosos, y ya voló para su París querido.

Supongo que Nina habrá encontrado un momento, entre biberón y cambio de pañales, para informar a Lulú de la marca de esos papeles que dan felicidad a los babies actuales y a los fabricantes del nuevo producto higiénico.

Cariñosos recuerdos a todos, y un gran abrazo de

Ayala.-


FECHA
26/12/1968
REMITENTE
Francisco Ayala
DESTINATARIOS/AS
Ricardo Gullón
Jorge Enjuto
DESTINO
S.l.
ORIGEN
S.l.
FICHA DESCRIPTIVA

[Carta mecanografiada con firma autógrafa y con membrete:] THE UNIVERSITY OF CHICAGO / CHICAGO. ILLINOIS 60637 / DEPARTMENT OF ROMANCE LANGUAGES AND LITERATURES / 1050 EAST 59TH STREET

DEPÓSITO DEL ORIGINAL
Harry Ransom Center. The University of Texas at Austin

Carta de Francisco Ayala a Ricardo Gullón (26/12/1968)

26 de dic. 1968

Mi querido Jorge:

Esta carta es para usted y, al mismo tiempo, para Ricardo, de quien no he recibido noticias ni, por consiguiente, sé las señas.

Encontrarán ustedes en ella un artículo sobre una novela mia. El autor ha venido a verme en estos dias. Me dice que remitió el original a La Torre siglos ha, y que no le han contestado ni para acusar recibo. (Bayón me cuenta en qué estado se encuentra eso, y nada me extraña). En fin, lo que quisiera de ustedes, y específicamente de Ricardo, que estará menos atareado, es que hagan publicar ese artículo, sobre la base del texto que ahora remito en sustitución del primitivo, pues el autor me dice que ha introducido varios cambios de importancia; y que me digan lo que haya. Ojalá que para cuando yo llegue pueda dársele al autor alguna noticia.

Espero, Ricardete, que aún estareis ahí unos dias para participar en las discusiones más o menos acaloradas que susciten mis conferencias.

Abrazos a todos

Ayala.-


Notas

Carta con dos destinatarios: Jorge Enjuto y Ricardo Gullón.