Cartas recibidas de Ricardo Gullón:

Ricardo Gullón

1908 Granada Granada - 1991

Licenciado en Derecho por la Universidad de Madrid en 1929, fundó con Ildefonso Manuel Gil la revista Literatura (1934). Alternó la docencia en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo con la práctica jurídica, tras una depuración de treinta meses por colaboración con el ejército republicano. 


En 1953 viajó a Puerto Rico, donde permaneció durante tres años. También enseñó Literatura Española en las universidades de Columbia, Chicago y Texas en Austin, entre otras. Ayala le dedica un capítulo de Recuerdos y olvidos.

cartas 31 al 35 de 44
FECHA
04/01/1968
REMITENTE
Ricardo Gullón
DESTINATARIOS/AS
Francisco Ayala
DESTINO
S.l.
ORIGEN
S.l.
FICHA DESCRIPTIVA

[Carta mecanografiada]

DEPÓSITO DEL ORIGINAL
Harry Ransom Center. The University of Texas at Austin

Carta de Ricardo Gullón a Francisco Ayala (04/01/1968)

4 de enero de 1968

Querido Paco:

Ante todo feliz año 1968, y ojalá que durante él tengamos oportunidad para estar juntos una larga temporada. En segundo término, unas líneas para decirte que tu antigua discípula Renée Walter me entregó tu carta en Chicago cuando yo estaba solicitado por varias gentes y en seguida desapareció, de modo que cuando leí tus líneas ya no me fue posible hablar con ella. Si quiere un puesto (y tiene el doctorado), dile que escriba una carta a Ramón Martínez López preguntándole qué posibilidades habría para colocarse aquí, uniendo a la carta su curriculum vitae y hoja de estudios. Así es mejor y yo podré manejar el asunto con Ramón.

Respecto a mis cosas, te diré que hablé con Cárdenas brevemente, y me indicó que había transmitido mi carta a la Administración y ésta no había dado todavía señales de vida. Incidentalmente me dijo, como tú más gráficamente me habías indicado, que lo bueno de vuestro departamento es que cada cual hace más o menos lo que quiere y nadie se mete con nadie.

El Acting Chairman de la Universidad de Illinois tuvo conmigo una larga conversación privada, en presencia de un tercer profesor. Más tarde, después que el primero me había informado con mucho detalle de todo, acudió el Decano y tuve con él un cambio de impresiones, más breve. La reunión se disolvió y estoy esperando cuál es la reacción de estos señores que, por cierto, ni me preguntaron mi sueldo ni dijeron cuáles eran sus intenciones en este punto, limitándose a señalar que las posibilidades eran flexibles.

En todo caso, estoy decidido a seguir el consejo de Lázaro y ahora tuyo, de dejar que las cosas salgan como mejor puedan, atendiendome a mis cosas que harto he descuidado por atender a las de los demás.

Agnes pasó con éxito la defensa de su tesis y ayer, cumplidos todos los requisitos, le dieron en la escuela graduada el documento acreditativo de que es ya “Doctor in Philosophy” por esta Universidad. Te manda muchos recuerdos y yo un abrazo muy fuerte


FECHA
14/03/1968
REMITENTE
Ricardo Gullón
DESTINATARIOS/AS
Francisco Ayala
DESTINO
54 West 16th Street. Apt. 4F. New York 11 N. Y.
ORIGEN
S.l.
FICHA DESCRIPTIVA

[Carta mecanografiada]

DEPÓSITO DEL ORIGINAL
Harry Ransom Center. The University of Texas at Austin

Carta de Ricardo Gullón a Francisco Ayala (14/03/1968)

14 de marzo de 1968

Prof. Francisco Ayala

54 West 16th Street

New York, N. Y.

Querido Paco:

Ayer tarde llamé a Compton para hablar por última vez respecto a su propuesta. Las cosas, en las circunstancias en que estaban, no implican para mí la menor ventaja, ni económica, ni de otro tipo. Así que lo único que han logrado con estas negociaciones, sobre todo al informar al decano Silber de que se estaban llevando a cabo es que aquí se haya producido una conmoción notable: los departamentos seguirán unidos, por lo menos durante un año, y habrá un nuevo jefe de inteligencia y carácter muy distintos al del anterior.

Mi falta de habilidad quizá no me ha hecho explotar a fondo las ventajas que podía haber sacado de la situación, pero en el cambio radical que ahora se produce espero que el ambiente será tranquilo y podremos trabajar en la misma forma en que lo hicimos inicialmente. Por de pronto es seguro que voy a pasar fuera ocho meses, pues el grant me ha sido ofrecido en firme y también que en los años siguientes podré obtenerlos con relativa facilidad, al menos una vez cada tres años.

Lo que no he podido entender es cómo el decano de Illinois tuvo la idea de llamar al de aquí. Según me ha dicho Roger Shattuck, lo hizo para comprobar ciertas las informaciones que yo le había dado respecto al sueldo y condiciones de trabajo. Parece imposible que así fuera, pues no puedo comprender que quisieran contratarme si dudaban de que les estuviera diciendo la verdad.

Quedan aquí problemas pendientes y especialmente el de la venida de Frondisi al Departamento, que se ha hecho, no sólo a espaldas mías, sino ignorando las necesidades de los estudiantes, que ya empiezan a barruntar de lo que se trata y a manifestar su descontento. Este problema ya no me afecta porque de un modo o de otro se resolverá mientras yo esté fuera y que se encarguen de solucionarlo quienes lo han creado.

Ahora, díme tus planes para el verano. Yo saldré para España en los primero días de junio y espero ir a Puerto Rico en agosto. Quizá pudiéramos coordinar nuestros movimientos de alguna manera. En España necesitaré mucho tu consejo para asúntos personales. Ya sabes cuántísimo aprecio tu amistad y cuánto me importa oír tu opinión, porque sé que es siempre serena y acertada.

Mil gracias otra vez y con saludos a Nina y de Agnes para vosotros dos, te envía un abrazo muy fuerte


FECHA
30/03/1968
REMITENTE
Ricardo Gullón
DESTINATARIOS/AS
Francisco Ayala
DESTINO
S.l.
ORIGEN
S.l.
FICHA DESCRIPTIVA

[Carta mecanografiada]

DEPÓSITO DEL ORIGINAL
Harry Ransom Center. The University of Texas at Austin

Carta de Ricardo Gullón a Francisco Ayala (30/03/1968)

30 de marzo de 1968

Querido Paco:

No he vuelto a escribirte esperando ver si tenía alguna noticia tuya y por la inseguridad respecto al lugar en que te encontraba. Por la carta de Agnes veo que das por supuesto que el haberme quedado aquí es porque no quiero desprenderme de Texas, y francamente no quiero que tú, por lo menos tú, creas que el no haber aceptado la invitación de Chicago Circle fue por sentirme apegado a esto.

El que no aceptara se debe a factores clarísimos. Empezaron ofreciéndome $22,000 anuales y cuando yo les dije que ganaba 23 y probablemente recibiría 25 en el mes de setiembre, no estoy seguro de que me creyeran, pues es en ese momento cuando se produce la conversación entre el decano de Chicago y el de aquí.

Me ofrecieron entonces los $25,000, pero en cambio Compton me dijo que no podía asegurarme que pudiera llevarse a cabo lo que en una conversación anterior me había ofrecido; a saber, que podía concentrar mis cursos en dos trimestres para quedarme libre seis meses. No olvides además que estas negociaciones las tuvieron paradas desde finales de diciembre hasta mediados de febrero, razón por la cual a primeros de febrero, me decidí a pedir aquí el grant para el año que viene, pues al menos quería asegurarme algún tiempo libre si fallaban negociaciones de caminar tan lento.

Como te dije, al informar al decano Silber se han mejorado algunas cosas. Otras no, porque para eso habría que cambiar la naturaleza de los hombres que le hacen a uno difícil la vida. Así estoy resignado pero de ninguna manera contento. Lo que pasa es que he decidido seguir el consejo que Lázaro y tú me habéis dado: me dedicaré a lo mío y que hagan lo que les dé la gana. Las consecuencias se verán en seguida, pero a mí personalmente no me afectarán: contratarán a los mediocres con preferencia a los inteligentes y establecerán una serie de programas absurdos. Al nuevo chairman le espera un trabajo de aupa, pues el departamento está pulverizado. Yo tengo por delante ocho meses de ausencia y a la vuelta me dedicaré a mis clases y a escribir. Si entre tanto sale alguna cosa que me interese, la aceptaré, pero no entraré en negociaciones con quienes no están decididos a proceder con rapidez y decisión. Compton me parece un chico muy bueno, pero ese decano que de entrada le ofrece veinte cuatro [sic] mil dólares a Homero Castillo y se le ocurre que a mí puede llevarme pagándome dos mil menos, no debe tener mucha idea de quién es quién.

De mis planes, te diré que pienso llegar a Madrid en los primeros días de junio y en algún momento ir a Puerto Rico, si es que las cosas se arreglan como espero. Es posible que después pasemos una temporada en Nueva York o en California pues cualquier sitio es bueno para escribir el libro machadesco que para entonces espero se encuentre muy avanzado. Nos encontraremos en Madrid y espero que también en Puerto Rico. En ese periodo de libertad de movimientos que voy a tener, exploraré discretamente las posibilidades de un cambio, pero voy a dejarme de puñeterías y a plantear claramente las cosas. Ahora pienso que si los de Chicago hubieran sabido antes lo que yo ganaba y la cuantía del aumento de sueldo que iba a recibir en el nuevo presupuesto, habríamos ganado tiempo y quizá todo se hubiera resuelto de otra manera.

Recuerdos a Nina y para ti un fuerte abrazo de


FECHA
10/03/1969
REMITENTE
Ricardo Gullón
DESTINATARIOS/AS
Francisco Ayala
DESTINO
54 West 16th Street. Apt. 4F. New York 11 N. Y.
ORIGEN
Austin
FICHA DESCRIPTIVA

[Carta mecanografiada]

DEPÓSITO DEL ORIGINAL
Harry Ransom Center. The University of Texas at Austin

Carta de Ricardo Gullón a Francisco Ayala (10/03/1969)

Austin, 10 de marzo de 1969.

Señor

D. Francisco Ayala

54 West 16th St.

New York, N.Y.

Querido Paco:

Mil gracias por tu carta, que me trae noticias de vosotros y de vuestro paradero. Veo que te has ido al calor de la nieta y supongo que estarás escribiendo algunas obras maestras de las que todos los meses empollas alguna.

Era de esperar que el mes de California fuera agradable, aunque nunca como nuestro delicioso Trópico. Nada me has dicho de cómo terminó el cursillo a cuya iniciación asistí, ni si tienes algún texto en que se recojan todas las cuestiones. Esas páginas podrían dar lugar a un examen crítico en algún periódico que quisiera consentirlo. Podríamos confrontar así nuestras opiniones y ver cómo reaccionaban los lectores si es que aun queda alguno.

Desde que vine no he tenido tiempo de hacer nada para mi, pero confío en que dentro de un par de semanas habré quedado libre de las urgencias más agobiantes y podré concentrarme durante el mes de abril para revisar los capítulos machadianos que todabía [sic] lo han menester. Entre las novedades que se refieren a mi trabajo hay una que espero te guste. Se trata de una muchacha inteligentisima, sin duda una de las dos o tres personas más inteligentes que hay en el departamento, estaba pensando escribir una tesis que incluyera una traducción de algunos cuentistas hispanoamericanos. Después de discutir el asunto por el reves y por el derecho y de leer varias cosas tuyas, ha decidido que la tesis consistirá en un largo estudio introductorio y en la traducción de La cabeza del cordero. En ambas cosas hará un trabajo de primer orden y no será nada difícil encontrar luego un editor para la uno y para lo otro. Paréceme, como diría Pereda, que tiene cerebro para que se le ocurran cosas nuevas leyendo tus obras, y su ingles es de veras excelente.

En cuanto al Chairman, es posible que por fin venga Cardona. Si no viene, de seguro le pesará luego, pues le han hecho una oferta excelente y las condiciones de trabajo no pueden ser mejores. En cualquier caso Chairman tendrá que haber, pues así no podemos seguir. Ramón vive en Carril, a ratos, y en Santiago otra parte del tiempo. Aqui está de cuerpo presente y un departamento tan grande y con tantos problemas no puede permitirse esos lujos. Pablo tiene que marcharse, pues una de las confusiones de Ramón, hizó que en lugar de comunicar al Decano la propuesta de ascenso y nombramiento de profesor permanente que unánimemente se acordó para nuestro amigo en enero de 1968, le mandase una carta pidiendo que le prorrogase la situación como profesor visitante durante el curso actual. Shattuk está ahora tratando de explicar lo inexplicable a la administración y de arreglar este mal paso, pero por buena que sea la solución, Pablo tendrá que estar fuera de aquí un par de años. Uno cuando menos pudiera pasarlo en el Canada, si es que encontramos una universidad que valga la pena.

Recuerdos a Nina y un abrazo

Ricardo Gullón


FECHA
23/04/1969
REMITENTE
Ricardo Gullón
DESTINATARIOS/AS
Francisco Ayala
DESTINO
University of Chicago. Department of Romance Languages and Literatures.
ORIGEN
Austin
FICHA DESCRIPTIVA

[Carta mecanografiada]

DEPÓSITO DEL ORIGINAL
Harry Ransom Center. The University of Texas at Austin

Carta de Ricardo Gullón a Francisco Ayala (23/04/1969)

Austin, 23 de abril de 1969.

Professor

Francisco Ayala

Department of Romance Languages and Literatures

The University of Chicago

1050 East 59th Street

Chicago, Illinois 60637

Querido Paco:

Aunque afeitado eres un tío con toda la barba. Nada menos que a Maryland te marchaste para evitar encontrarnos en Chicago. Nosotros que pensabamos estar tres horas o quizá más en la ilustre ciudad del Lupo para pasarlas contigo y resulta que te habías largado a mil millas de distancia. En vista de eso nos pasamos las horas extras en Dallas, sin correr peligro puesto que no somos presidentes de nada.

La visita a Bloomington resultó muy agradable, pero demasiado alcoholica, pues se concentraron las cosas de tal modo que todos los días tuvimos algún cocktail y la cena correspondiente en casa de amigos que se esforzaron en mostrarnos su generosidad, especialmente en lo que a la bebelata se refiere.

Tu mini carta del mes pasado me dejo esperanzado en cuanto a recibir pronto el ensayo sobre la novela, del que oí parte en Puerto Rico, y deprimido al ver que no nos encontraremos en agosto en Puerto Rico y que en cambio piensas largarte a Buenos Aires, ciudad que queda muy lejos para mis planes de este verano. No se cuando nos veremos pues yo no voy a moverme de aquí hasta mediados de julio, y en el otoño no será tampoco mucho lo que haga, pues necesito ir preparando los materiales para el libraco sobre el modernismo en que me meteré tan pronto termine con el Machado y la Antología de Rubén Darío que preparo a efectos textiles. Agnes ha hecho toda su parte hace más de una año pero yo sólo tengo algunas notas dispersas para lo que ha de ser el prólogo.

Escribeme largo y tendido. Ya te diré, por mi parte lo que la muchacha Waisman, que tiene un cerebro de primer orden, hace con La cabeza del cordero, y cuando llegue el caso te pasaré copia de la traducción y de la introducción.

Imagino que estás enterado de que al fin me dieron la Guggi. Como la chica es de buena familia, la trataré bien. Y digo que imagino que lo sabes por cierta carta que he recibido y tras de la cual me ha parecido ver tu mano amiga.

Pasquariello se marcha de Penn. State a la Universidad de Illinois, y Javier está preocupado por la repercusión que este cambio puede tener sobre sus planes. Douwling está muy interesado en llevárselo a Indiana, pero no estoy muy seguro de que al chico le convenga precipitarse a tomar una decisión. En todo caso, tiempo hay, puesto que el año próximo aun seguirá en Penn.

De una semana a otra llegará aquí Germán y espero que sea posible encontrar para él algo que le guste. De momento quiere trabajar conmigo una temporada, pero temo que se canse pronto del ritmo que proyecto imponerle. Este semestre ha trabajado bien francés y ha soportado las pejigueras militares, de las que se libera a finales de este mes. Espero que llegue a Estados Unidos el próximo mes.

Un abrazo muy fuerte de

Ricardo Gullón