Epistolario de Francisco Ayala

23/10/1963

DESTINATARIO: Gullón, Ricardo REMITENTE: Ayala, Francisco

FECHA
23/10/1963
REMITENTE
Francisco Ayala
DESTINATARIOS/AS
Ricardo Gullón
DESTINO
S.l.
ORIGEN
S.l.
FICHA DESCRIPTIVA

[Carta mecanografiada con firma autógrafa y correcciones a mano]

DEPÓSITO DEL ORIGINAL
Harry Ransom Center. The University of Texas at Austin

Carta de Francisco Ayala a Ricardo Gullón (23/10/1963)

23 de octubre de 1963

Querido Ricardo:

Recibo tu carta y la contesto inmediatamente, no por que, según supones, disponga yo de tiempo en abundancia, sino más bien por todo lo contrario, ya que si no te contesto ahora, dia miércoles, que no tengo clases, debería pasar varios dias sin hacerlo, y se demoraría el invio [sic] de la importante información que me pides acerca de mis pretéritas hazañas, que luego te daré con la puntualidad y veracidad del caso. Me alegro mucho de que te decidas, por fin, a publicar ese libro, y de que me incluyas en él. También me gusta que hagas un estudio de Jarnés, que bien lo merece. Supongo que habrás visto el de Paul Ilie en PMLA, June 61; y quizás no hayas visto el de Emilia de Zuleta en el núm. 55 de Universidad, la revista de la Nacional del Litoral, correspondiente al primer trimestre de este año. Por otra parte, un tal Victor Fuentes, que es uno de estos jóvenes mangantones que produce hoy con abundancia la Madre Patria, está haciendo bajo mi dirección, digámoslo así, una tesis doctoral sobre Jarnés; pero ésta va a resultar un verdadero pastel, pues el nene es algo serio, y... ¡pobre Jarnés! Muy bueno es que salga tu estudio, y lo bastante pronto para que yo pueda exigirle a este doctorando que, para pasar del gerundio al sustantivo, lo tenga en cuenta en su tesis.

Los datos que me pides son: licenciado en Derecho 1929; doctor en id., 1931; Oficial Letrado del Congreso,1932; Catedrático titular, 1934; primer viaje a Sudamérica, para dar conferencias en Argentina, Uruguay y Chile, 1935; durante la guerra civil trabajé en el servicio diplomático; en 1939, a Buenos Aires; el año 1945 lo pasé íntegro en Rio de Janeiro, con un contrato para enseñar en una escuela de funcionarios; desde 1946 a 1950, otra vez en Buenos Aires; desde 1950 en Puerto Rico; en 1955 y luego otra vez en 1957, profesor visitante en Princeton; 1958, Rutgers; 1959, Bryn Mawr; 1961, NYU. Olvidé decir que en 1929-30 estuve estudiando en Berlín con beca de la Univ. de Madrid, y que a principios del 31 contraje en esa ciudad justas nupcias; pero supongo que, como el libro se publicará en español, y no aquí, el dato no le importa a naides [sic]. ¿Algo más? Respecto de mis orígenes, ahí está el libro de Fernández Almagro Viaje al siglo XX donde habla de mi abuelo y de mis padres y da la importante noticia de mi nacimiento. Si no lo tienes y te interesa, puedo sacar fotocopia de las páginas del caso.

De Puerto Rico, ni una palabra. Escribí a Fernández Méndez preguntándole por mi libro, y ni una palabra; escribí al inefable Manolín Mal... donado Denis, preguntándole por otra cosa, y este muchacho debe tener enredados los pies en las bolas, como en las tripas los caballos de picador, de modo que no avanza, no escribe.

Dale a Arocena mis recuerdos. ¿Está ahí solo o con la familia? ¿Piensa venir por acá? Supongo que sí. Tengo mucha gana de verlo. Dile que me escriba si, como es de suponer, le sobra el tiempo, en el disfrute de esa bicoca. Y hazle saber que está por aquí (ahora en Washington) su colega Salas.

A la dorada Inés, transmítele mis saludos, y recomiéndale que no inspeccione libros que no están escritos para niñas inocentes, sino para viejos depravados, que son quienes, como tú, pueden recrearse en cosas tales.

Escribe, que –ya puedes verlo– he reanudado la costumbre de contestar de inmediato. Tus cartas son uno de los pocos gustos verdaderos que en este desierto mundo superpoblado me trae de vez en cuando el correo.

Recibe, con los saludos de Nina, un fuerte abrazo de

Ayala.-