Las cartas de Francisco Ayala sobre

University of Chicago

The University of Chicago (Illinois)

Ayala comienza sus clases como profesor del Departamento de Lenguas y Literaturas Románicas de la Universidad de Chicago en otoño de 1966, con un sueldo "excepcional para un profesor de Humanidades". También le resultaba conveniente la posibilidad de, concentrando sus periodos docentes, pasar parte del año en Nueva York, donde vivía su familia y a donde volvería tras comunicar, en noviembre de 1972, su intención de incorporarse al Brooklyn College de la City University of New York.


Las páginas de El jardín de las delicias "evocan, transfigurados por la intención artística, lugares, personas, situaciones que constituyeron la materia de mi existir en el mundo" durante este periodo. En Chicago dirigió, entre otras, la tesis doctoral de Ángeles Prado, "criatura única" que "había de marcar en mi vida huella indeleble".

cartas 1 al 5 de 37
FECHA
12/03/1957
REMITENTE
Francisco Ayala
DESTINATARIOS/AS
Vicente Llorens
DESTINO
Princeton University. Department of Modern Languages and Literatures
ORIGEN
Bombay
FICHA DESCRIPTIVA

[Carta mecanografiada con firma autógrafa]

DEPÓSITO DEL ORIGINAL
Biblioteca Valenciana Nicolau Primitiu. Archivo Vicente Llorens

Carta de Francisco Ayala a Vicente Llorens (12/03/1957)

Bombay, 12 de marzo de 1957.

Querido Vicente:

A toda prisa, contesto a tu carta escrita a toda prisa. (Me parece tan raro estar escribiéndote desde Bombay!).

Me interesa, y agradezco, la oferta de volver a trabajar con ustedes por un semestre; pero tendría que ser, no el de otoño, sino el de primavera. La razón es obvia. Inmediatamente después de la licencia sabática estaría feo que dejara la universidad de Puerto Rico. En cambio, si nos pusiéramos de acuerdo, yo regresaría a mi puesto antes de que dicha licencia finalice, y así para el segundo semestre estaría en condiciones de plantear la cuestión. Desde el punto de vista de Princeton me parece que tampoco estaría mal eso, porque ahora cuando yo regrese a Estados Unidos (cosa que tendrá lugar dentro de un mes, poco más o menos) podría combinar, de acuerdo con los compañeros, el programa para todo el año, de manera que cuando me incorporase yo en el segundo semestre tuvieran ya los alumnos una preparación destinada a aprovecharlo mejor. En fin, cuando yo regrese, dentro de pocas semanas, podremos conversar para ponernos de acuerdo. Con esta lineas sólo quiero anticiparles a ustedes mi disposición.

Inter nós te diré que me gustaría para lo sucesivo ver si hay modo de llegar a un acuerdo permanente para trabajar en Princeton. Al instalarse mi arquitecta en Nueva York, me resulta demasiado pesado vivir en Puerto Rico; y cuando hace meses me escribió Corominas ofreciéndome un contrato definitivo en Chicago dejé la respuesta definitiva pendiente, para ver si existe o no una posibilidad tal en Princeton, que por varias razones preferiría... (Chico, perdona esta mecanografía asquerosa). Si así fuera, tendríamos tiempo de ajustar condiciones.

Bueno, hasta pronto, y otra ves muchas gracias.

Un abrazo de

Ayala.-


FECHA
10/04/1966
REMITENTE
Francisco Ayala
DESTINATARIOS/AS
Ricardo Gullón
DESTINO
S.l.
ORIGEN
S.l.
FICHA DESCRIPTIVA

[Carta mecanografiada con correcciones a mano, firma autógrafa y membrete:] NEW YORK UNIVERSITY / GRADUATE SCHOOL OF ARTS AND SCIENCE / WASHINGTON SQUARE, NEW YORK 3, N.Y.

DEPÓSITO DEL ORIGINAL
Harry Ransom Center. The University of Texas at Austin

Carta de Francisco Ayala a Ricardo Gullón (10/04/1966)

10 de abril de 1966

Mi querido Ricardo: Te agradezco muchísimo el tono de confianza con que está escrita tu carta última, y con la misma intimidad te contesto a ella haciendo comentarios que son, claro está, para tu exclusivo consumo. #Ante todo te diré que he aceptado por fin lo de Chicago. El jueves pasado estuve allí, vi cómo eran las cosas sobre el terreno, llegamos a un acuerdo sobre los puntos que a mí más me importan, y hoy escribiré mi carta de dimisión a NYU. #Entre tanto, Rodrigo ha tenido una trifulca con el chairman, según aquel me cuenta por teléfono, pues se siente desconsiderado, preterido, ofendido y humillado, es decir, privado del poder (del “mando, mucho mando”) que tanto ambiciona. Lo que le pasa en el fondo es que se ha puesto muy soliviantado al ver la propuesta lucrativa y honorífica que me han hecho a mí, pues cosa tal tiene que hacérsele insufrible a una persona que piensa, como piensa él (y a mí también me lo tiene repetido) que las distinciones o ventajas con que el prójimo pueda verse favorecido se deben a su simpatía y buenas amistades (léase: a que uno es un vivo, y un pillastre, y se maneja entre contubernios), en lugar de pensar que Dios, en sus inescrutables designios, distribuye diversamente sus gracias entre los hijos de Adán, dando lugar así a la envidia cainita. Estará preguntándose probablemente por qué medios y con qué intrigas astutamente puestas en juego habré logrado yo esa que él juzga bicoca, sin darse cuenta que, dadas las condiciones actuales, basta tirarse un pedo para que le ofrezcan a uno el oro y el moro, y que, relativamente hablando, si el que tiene algún merito encuentra cierta recompensa, el que no tiene ninguno, o tiene deméritos, está disfrutando de una situación que las circunstancias increíbles de la vida universitaria actual hubiera hecho incocebible ni aún para soñada hace no más que diez años.#Por otro lado, es también cierto (y ¡claro está! debido a esas mismas circunstancias) que el chairman, un buen hombre por lo demás, es absolutamente negado. Incapaz de entender nada ni de hacer las cosas por sí mismo, despistado en cuanto a quién es quién, un cierto instinto le hace sin embargo desconfiar de Rodrigo, y no le deja meter cuchara, lo tiene a raya, y éste se siente frustrado en sus ansias de control y autoridad, que busca satisfacer por el camino desviado de la administración, ya que en las clases carece de dominio. Así están las cosas. El departamento, y la universidad entera, es un marasmo. Y en cuanto al chairman, Starr, tengo la impresión de que se le considera fracasado y no tardará demasiado en dar el bote. Aunque nunca se sabe, pues en su dia lo buscaron con candil… Como yo he de estar aquí todavía un mes o algo más, pudiera ser que me preguntaran acerca de la sustitución (sin cuya pregunta no puedo yo, como comprenderás, sugerir nada); pero pudiera ser, digo, porque estoy procurando quedar en los mejores términos con la Administración. ¡Ojalá! # Estos dias, como te imaginaras, no he hecho nada más que ocuparme con estos jaleos, y asistir con mis experimentados consejos a mi hija y yerno en la innoble pero también inevitable manipulación de las ofertas de puestos que ellos también han recibido, como cada quisque…# Para los efectos de nuestro posibles encuentros en el futuro próximo te diré que en Chicago empiezo a enseñar para principios de octubre (ahí tienen el sistema de quarters) y enseñaré ése, que es el de otoño, y el de invierno, por lo pronto; luego, ya se verá. Desde luego, tengo plena libertad de movimientos, dentro de lo discreto; y lo discreto es que esos dos quarters los enseñe. Iré a Madrid en junio, pero estaremos aquí a principios de julio para asistir a nuestra natividad. Lo que haya de hacer hasta el 1º de octubre, no lo sé, aunque probablemente me aplique a escribir algo nuevo. No dejes de darme tus noticias pronto. Recuerdos de Nina y un gran abrazo.

Ayala.-


FECHA
29/04/1966
REMITENTE
Francisco Ayala
DESTINATARIOS/AS
José Luis Cano
DESTINO
Av. de los Toreros 51. Madrid
ORIGEN
Nueva York
FICHA DESCRIPTIVA

[Carta mecanografiada con firma autógrafa]

DEPÓSITO DEL ORIGINAL
Biblioteca del Centro Cultural de la Generación del 27

Carta de Francisco Ayala a José Luis Cano (29/04/1966)

29 de abril de 1966

Querido José Luis:

Recibo tu carta acusando recibo del artículito valleinclanesco. Yo en cambio no he recibido (y temo que no recibiré nunca) los números de Insula, pues si, como dice Canito, estoy en la lista desde este año, estamos terminando mayo [sic] y sus hojas no han florecido en mi balcón. No te molestes más, pues se ve que eso no tiene remedio.

Me alegro de que esté resuelto lo de tu viaje a Estados Unidos para octubre. Si lo hubieras organizado de manera que esos cuatro meses incluyeran las seis semanas de un curso de verano te resultaría más remunerador, pues la gira de conferencias, aunque sólo sean 20, es para reventar, y quizás no rinda tanto como de la otra manera hubieras podido sacar.

¿No te tienta lo de los Angeles? Esas universidades están pagando mucho mejor. Yo mismo he recibido y aceptado una oferta de la universidad de Chicago que me permitirá, entre otras ventajas, tener más libertad de movimientos y no estar constreñido a las vacaciones veraniegas. Empiezo en octubre.

A Marra vas a verlo poco más o menos cuando te llegue esta carta, pues está aquí, pero me parece que el domingo, o sea pasado mañana, piensa volar; de modo que él te contará de su vida y milagros mucho mejor y más ampliamente que yo pudiera hacerlo.

Ricardo, según me parece, está envuelto en trabajo y preocupaciones universitarias, y eso explica que no te haya escrito en estos dias, pero de seguro lo hará pronto. Respecto de esta zona, además de la consabida Casa Hispánica, probablemente surgirán otras posibilidades. En la Universidad de Nueva York son muy refractarios a oir conferencias, y menos a pagarlas. En los cuatro años que yo he estado aquí conseguí que hablaran Cela, la Matute y Murena, y este año Aranguren, y con éste último me han dado el disgusto de pagarle sólo $50 después de largas y agrias negociaciones. Hay una universidad de frailes en Brooklyn que ahora da algunas conferencias, y cuando se acerque el momento procuraré sugerirles tu nombre, con bastantes probabilidades de éxito. Respecto de la Universidad de Nueva York, de donde ya he dimitido, lo mejor sería que le escribieras a Rodrigo Molina, a quien conoces, diciéndole que vas a venir y que quisieras dar una conferencia, a condición de que te la paguen, el dia 11, 12 o 13 de octubre, que son las fechas disponibles para tí en Nueva York. Sobre todo esto podrá darte Marra sus impresiones frescas, pues acaba de hacer su correspondiente gira, y sabe mejor que yo.

Nada más por hoy. Seguimos las noticias de España en los periódicos de aquí con el natural interés. Yo espero estar ahí siquiera un par de semanas o tres en junio, pues para julio debo volver a Estados Unidos, de modo que entonces volveremos a tener ocasión de charlar de todo.

Un gran abrazo de

Ayala.-


FECHA
01/06/1966
REMITENTE
Max Aub
DESTINATARIOS/AS
Francisco Ayala
DESTINO
S.l.
ORIGEN
S.l.
FICHA DESCRIPTIVA

[Carta mecanografiada]

DEPÓSITO DEL ORIGINAL
Fundación Max Aub. ©Max Aub y Herederos de Max Aub

Carta de Max Aub a Francisco Ayala (01/06/1966)

1º. de junio de 1966

Querido Paco:

Mil años sin noticias vuestras y he sabido por varios conductos que os váis a vivir a Chicago. Supongo que es por razones económicas y que te habrán dado un sueldo fenómeno. ¿Qué váis a hacer este verano?

Con la crisis de la Universidad, de la que te supongo enterado, he dejado de ser director de Radio al mismo tiempo que el doctor Chávez dejó de ser Rector. He aceptado, por medio de la UNESCO, dar un curso en la Universidad Hebrea de Jerusalem de noviembre a marzo. Así que lo más probable es que nos vayamos en octubre a Europa.

No sé si conoces a un editor de nombre Alejandro Finisterre. Quiere hacer una serie: “El nuevo pensamiento político español”. Y está en prensa el primer tomito, de Juan Marichal. Le pido textos a Aranguren, Galván, Ridruejo. Como es natural le he prometido, para en seguida, un tomo o tomito tuyo. A ver qué tienes, a ver qué quieres publicar. Con Marichal quedé, como pago, en que le enviara el diez por ciento del número de los ejemplares, que no pueden ser muchos en la primera edición. Contéstame.

Acabé mis novelas de la guerra de España con un tomito de 700 cuartillas.

Para la colección antedicha ¿a quién se te ocurre que se le podría pedir algún texto? Grandes abrazos para los dos de los dos.


FECHA
18/06/1966
REMITENTE
Francisco Ayala
DESTINATARIOS/AS
Max Aub
DESTINO
S.l.
ORIGEN
S.l.
FICHA DESCRIPTIVA

[Carta mecanografiada con firma autógrafa]

DEPÓSITO DEL ORIGINAL
Fundación Max Aub

Carta de Francisco Ayala a Max Aub (18/06/1966)

18 de junio 1966

Mi querido Max:

Nina, junior, que gesta pacientemente en Nueva York, me envia tu carta del día 1º., a la que contesto enseguida. Es cierto que voy a enseñar en Chicago, pero manteniendo el domicilio de Nueva York, pues el nuevo puesto me consiente gran libertad de movimientos, y Nina, en su calidad de abuela inminente, no quiere, y es muy lógico, separarse de nuestra hija y lo que viniere.

Ya me habías dicho lo de Jerusalem, y veo que se ha concretado. Me alegro, pues constituye una experiencia más. Supongo, y hasta creo estar seguro, de que te concederán también la beca Guggenheim, y eso te proporcionará cierta holgura para escribir. A la vejez, por causa de las circunstancias absurdas de nuestras vidas, y del caso de este pais, estamos recibiendo el reconocimiento que se nos debe. En el último núm. de Cuadernos para el Diálogo he visto una cosa tuya reproducida, y un artículo. Yo, por mi lado, también estoy haciendo acto de presencia en modos diversos. Más vale tarde que nunca.

Lo que me dices de “El Nuevo pensamiento político español” me parece muy bien, pero habrá que volver a hablar sobre ello, pues de momento no tengo nada, y aquí me están urgiendo a que escriba algo. ¿Tú no piensas pasar por Estados Unidos a tu ida hacia Jerusalem? Me gustaría que hablásemos. Y quizás se podría urdir alguna cosa antes, no sé.

Te felicito por haber acabado un nuevo tomo sobre la guerra de España, y ya ardo en impaciencia por verlo.

No dejes de procurar que me envien un ejemplar de la Historia de la Literatura, pues creo que para los editores será útil que yo la tenga a mano.

He estado el otro dia con Antonio Espina, que está formidable de salud y aspecto; pienso que nos volveremos a ver, aunque yo no voy a estar ya muchos dias. Después de algunos en París, el 15 de julio estaremos de vuelta en Nueva York, donde espero noticias tuyas.

Nuestros cariñosos saludos a Peua, y un abrazo muy fuerte de

Ayala.-