Las cartas de Francisco Ayala sobre

Jaime Benítez

Jaime Benítez. Vieques, Puerto Rico, 1908-San Juan, 2001.

Fue rector y más tarde presidente de la Universidad de Puerto Rico entre 1942 y 1972.


De la mano del gobernador Luis Muñoz Marín, participó en el programa de reformas que condujeron a la proclamación de Puerto Rico como Estado Libre Asociado de los Estados Unidos de América y a la modernización del sistema educativo del país, en la línea de lo propuesto por Ortega y Gasset, de quien Benítez fue discípulo y amigo. Brindó a Francisco Ayala, que impartía un curso de Ciencias Sociales, la posibilidad de asesorar la reforma política del país y de dirigir las ediciones de la universidad. La amistad entre ambos continuó hasta la muerte de Benítez.

cartas 16 al 20 de 52
FECHA
08/03/1960
REMITENTE
Francisco Ayala
DESTINATARIOS/AS
Jorge Enjuto
DESTINO
S.l.
ORIGEN
S.l.
FICHA DESCRIPTIVA

[Carta mecanografiada con firma autógrafa y con membrete:] BRYN MAWR COLLEGE / BRYN MAWR, PENNSYLVANIA / DEPARTMENT OF SPANISH

DEPÓSITO DEL ORIGINAL
Fondo Jaime Benítez. Universidad de Puerto Rico

Carta de Francisco Ayala a Jorge Enjuto (08/03/1960)

8 de marzo de 1960

Mi querido Jorge:

Mil gracias otra vez por su eficacia amistosa. El expediente de Nina llegó enseguida, y creo que, por lo que a este asunto se refiere, no tengo necesidad de molestarle más.

Tampoco quería hacerlo para lo relativo a la Caja de Jubilaciones, y ya estaba pensando a qué otro amigo recurrir para llevar la lata delante; inclusive se me ocurrió el nombre Manolín; pero como usted ha tenido la imprudencia de preguntarme si recibí el informe de la Asociación, etc., usted va a seguir cargando con la lata susodicha. Escribí a la dirección que usted me proporcionó la siguiente carta, que textualmente copio: “Estimado Sr. Roig: Probablemente por ignorar ustedes mi actual dirección, no he recibido desde que estoy en uso de licencia ningún resumen de mi cuenta en esa Asociación. –Le agradeceré que disponga tomar nota de mis señas, que son las del membrete, y me dirijan a ellas los papeles que deba recibir como miembro de la Asociación. –Atentamente…” A esa carta, que además de muy fina me parece bastante clara, recibo la respuesta mimeografiada que le remito a usted con el formulario adjunto. En vista de ello, he pensado que lo mejor es, en efecto, llenar ese formulario y que me devuelva los chavos; primero, porque más vale pájaro en mano que…, etc.; segundo, porque si alguna vez me jubilara, dada la eficacia burocrática de la organización, cobrarían esos centavos mis bisnietos, y eso si tenían suerte; y tercero, porque si alguna vez me resuelvo, como no sería imposible, a volver a la UPR y ahí me quieren todavía para entonces, ya veríamos de arreglar ese asunto, que es mínimo.

Por consiguiente, he llenado con mi hermosa firma el lugar correspondiente del papelucho, y se lo remito a usted para que consulte la cuestión con don Jaime, y arreglen mi renuncia, de modo que yo reciba devuelto ese dinero, que por lo visto no quieren devolver si no es renunciando al cargo. Usted sabe que yo prescindía de él, y lo dejaba ahí, aunque me parece absurdo que uno no pueda disponer de lo suyo, y aunque ya sé que a los efectos prácticos ello significara darlo por perdido. Pero puesto que ellos me invitan elegantemente a renunciar, no tengo inconveniente, y aún me parece preferible. Tenga, pues, la bondad de hablarlo con el Rector, y decirme si no hay otra fórmula, y cómo debo presentar la renuncia.

Y perdona tanto fastidio.

Abrazos

Francisco Ayala.-

Dígale a Aurorita que ya he visto Insula y que la felicito muy cordialmente.


FECHA
09/03/1960
REMITENTE
Damián Bayón
DESTINATARIOS/AS
Francisco Ayala
DESTINO
S.l.
ORIGEN
París
FICHA DESCRIPTIVA

[Carta mecanografiada]

DEPÓSITO DEL ORIGINAL
Instituto de América de Santa Fe. Legado Damián Bayón. Archivo (Santa Fe, Granada)

Carta de Damián Bayón a Francisco Ayala (09/03/1960)

París, 9 de marzo de 1960

Querido Ayala:

Recibida hace ya tiempo su sabia y modesta carta. Gracias. Sí, me parece que tiene razón, comprando Uds. auto estaremos todos más libres de hacer lo que queramos o podamos. Por aquí las cosas marchan, yo metido en mis libros y olvidado casi de que París canta con el canto de las sirenas. Los Cortázar volvieron hace diez días, los vi la noche de llegada solamente. Venían tostados del sol y contentos. Dejaron Bs.As. no tan mal como lo encontraron unos meses antes y pudieron trabajar en el barco de vuelta. Julio está de moda entre la “nouvelle vague” argentina. El hecho de no vivir allí lo debe valorizar aun más. Las armas secretas , su último libro, se vende bien y Sudamericana le ha pedido dos de sus novelas, inéditas hasta ahora. El gran cronopio está contento, no habla en el vacío. A Aurora la contrataron para traducir los libros de Lawrence Durrel: Justine, Balthazar y Mountolive y cuando salga el cuarto de la serie, ese también. Como el autor me gusta me ha parecido estupendo que Aurora lo traduzca, pero le sacará canas verdes.

Me fuí por unos días a Suiza y en el interín pasó por aquí Raimundo Lida y señora. Lo sentí verdaderamente. Lo mismo me pasó con los Orfila, un almuerzo junto[s] y después ya no coincidimos más. No se puede estar en la procesión y repicar, o viceversa.

Después de un pesado librote sobre Carlos Vº me despaché uno ligero sobre Felipe IIº y sigo hurgando en las librerías en busca de algo. Los libros españoles son tan caros aquí que prefiero comprarlos en España o la Argentina. No encontré los que Ud. me señaló. Ahora estoy embarcado en España en su historia , de Américo Castro y me entero de cosas y me confirmo en otras con gran deleite. Me parece menos nacionalista que el gran viejo Menéndez Pidal y no hay duda de que tiene muchas cosas interesantes que decir. En Egipto descubrí a América -a través de España- con sus ruidos callejeros, el negro llevado por las mujeres, la primacía del hombre. Para nosotros el origen es siempre España, pero ¡qué extraño es cuándo descubrimos los orígenes del origen! Y que didáctico resulta. Nos habíamos acostumbrado a pensar una España y resulta, claro, que estaba hecha de tantas cosas contradictorias resueltas -o no resueltas- en la historia.

Me gustaría ya saber las fechas del viaje de Uds. ¿Las hay? No deje de comunicármelas. De P.R. siempre estoy informado por la fiel Luisita. Parece que Jorge Enjuto trabaja de veras pues está en la Oficina del Rector ¿Sabe el cuento de D. Jaime con Oppenheimer? El día que éste pareció era al siguiente de la muerte de Bueso, el Rector se hizo un lío y al presentar al famoso Premio Nobel, agregó: Dr. Roberto Eisenhower... Parece que la gente se rió a carcajadas. Y es que Ike andaba por allí también y el inconsciente le jugó una mala pasada. Ayer en clase a Levi-Strauss le pasó algo parecido; hablaba del chamán y de unos sueños eróticos y dijo: “Le savant et ses rêves érotiques...”.

Un gran abrazo de


FECHA
12/04/1960
REMITENTE
Jorge Enjuto
DESTINATARIOS/AS
Francisco Ayala
DESTINO
54 West 16th Street. Apt. 4F. New York 11 N. Y.
ORIGEN
S.l.
FICHA DESCRIPTIVA

[Carta mecanografiada]

DEPÓSITO DEL ORIGINAL
Fondo Jaime Benítez. Universidad de Puerto Rico

Carta de Jorge Enjuto a Francisco Ayala (12/04/1960)

12 de abril de 1960

Sr. Francisco Ayala

54 West 16th Street

Apt. 4 F

New York 11, New York

Apreciado don Paco:

Como le prometí en mi carta anterior, he estado ocupándome de su asunto y, después del necesario retraso que exige aclarar cosas tan profundas como son los problemas administrativos, aquí le envío los resultados. ¡Albricias! Tiene usted, si mal no me han informado, un total de $ 3,202.85 entre la Junta de Retiro (2,038.44) y la Asociación de Empleados del Gobierno Insular (1,664.4, Ahorros y dividendos). Como verá, es ésta una sensacional noticia que estoy seguro habrá de sorprenderle, porque nunca nos damos clara cuenta de lo que para una u otra cosa se nos deduce de los ya de por sí exiguos cheques. Esto, si mis esfuerzos en urgir su tramitación se ven coronados por el éxito, le servirá a ustedes para darse por Europa un viajecito de rechupete.

Vamos ahora a los trámites que tiene que cumplir para recibir este agradable regalo de los dioses.

1- Escribir una carta a don Jaime renunciado a su puesto en la Universidad. Don Jaime, muy a su pesar –y así me lo hizo saber– no tendrá otro remedio que contestarle aceptando su renuncia. Estaba bastante reacio a verle renunciar, pero cuando se enteró de la cantidad que ello suponía, no pudo menos de comprender la fundamentación de sus argumentos. De todas formas, aunque esto no pase de ser un trámite, comprendo perfectamente el sentimiento de don Jaime, porque hasta cierto punto, yo también lo experimento. Una vez que haya usted escrito la carta de renuncia, deberá escribir a su vez, al Sr. Francisco Rivera Brenes, Secretario Ejecutivo de la Junta de Retiro, notificándole de sus intenciones de retirarse definitivamente como miembro de la Universidad y del Gobierno de Puerto Rico. Esto hará posible que se inicien los trámites de devolución en la Junta de Retiro. Una vez que haya usted escrito estas dos cartas, pondré todos los medios a mi alcance para acelerar el proceso. Le estoy enviando todos los formularios que deberá usted llenar o firmar para los propósitos señalados.

Según me señala la Oficina de Personal Docente, desde el 10 de octubre de 1957, disfrutó usted de licencia sin sueldo. Le envío este dato en caso que quiera emplearlo en su carta de renuncia.

Hablando ahora de otras cosas menos prosaicas, aunque naturalmente nunca tan importantes, le diré que hemos recibido esta mañana carta de Damián Bayón. En ella nos dice que ustedes se van a París el día 22 de mayo y que el 1 de junio recibirán un flamante automóvil en el que piensan hacer un fenomenal viaje por toda la Península Ibérica. Aurorita, cuando tal leyó, dio grandes gritos de contento. Han de saber que se las ha agenciado, pese a mi natural y celtibérica renuencia, para conseguir una licencia de verano con el objeto de patearse la Península, diz que para buscar datos nuevos sobre Machado, de quien piensa, en un futuro próximo, publicar las obras completas. Yo todavía no había dado mi definitivo consentimiento, pero supongo que no me quedará otro remedio que acceder a su marcha, a pesar de la envidia que habré de sentir teniéndome que quedar sin este codiciado viaje.

Piensa salir de aquí a fines de mayo para quedarse unos dos meses, principalmente en Madrid. Quiere visitar Baeza y algunos otros paisajes machadianos –Soria, Sevilla, etc.– así que a lo mejor sus itinerarios se cruzan en algún momento. Espera verlos por allá, así que dennos detalles de su viaje y de cuando llegarán a la Villa del Oso y del Madroño.

Bueno, basta ya de lata y escriba las cartas de renuncia lo antes posible. Yo, por mi parte, trataré de activar, en lo que pueda, el reembolso de sus bien adquiridos dineros.

Un fuerte abrazo para los dos de este buen amigo que tanto les aprecia,

Jorge

eigo

Anexos: 3


FECHA
16/04/1960
REMITENTE
Francisco Ayala
DESTINATARIOS/AS
Jorge Enjuto
DESTINO
S.l.
ORIGEN
S.l.
FICHA DESCRIPTIVA

[Carta mecanografiada con firma autógrafa y con membrete:] FRANCISCO AYALA / 54 WEST 16TH STREET / APT. 4F / NEW YORK 11 N. Y.

DEPÓSITO DEL ORIGINAL
Fondo Jaime Benítez. Universidad de Puerto Rico

Carta de Francisco Ayala a Jorge Enjuto (16/04/1960)

16 de abril de 1960.

Mi querido Jorge: Ha sido ocasión de gran alegría para nosotros el saber que Aurorita, alias Gato, va a ir a Madrid para el mismo tiempo que nosotros, y que, no sólo tendremos ocasión de encontrarnos con ella con la debida frecuencia y siempre que su delicada salud lo consienta, sino probablemente, de llevarla con nosotros por las espléndidas highways, autostradas o autobahnen de la Madre Patria, a lo mejor con el aditamento de Damián, que parece animado a acompañarnos. Y estoy seguro, pese a su silencio, de que usted mismo surcará el piélago, o los aires por encima de él, pues no me cabe duda de que el Rector necesitará imprescindiblemente de su compañía y asistencia en el viaje que debe realizar a Europa. De modo que, desde ahora, ya le digo a usted: Hasta muy pronto, Jorge.

Nosotros llegaremos a París el 23 de mayo; en los primeros dias de junio estaremos en Madrid (tales son nuestros planes), y el 11 o 12 en Granada. Luego, no sé. Hasta el 19 de julio, dia que debo dar una conferencia en la Universidad de Berlín. Luego, iremos a Inglaterra. Dígame, por lo pronto, donde vivirá Aurorita en Madrid, para que no tardemos en dar con ella.

Encontrará usted adjunta a la carta la renuncia a don Jaime, y la otra a Rivera Brenes, así como los dos impresos firmados. Por supuesto, no es menester que yo reciba la respuesta del Rector. Cuando la haya firmado, úsela si es necesario en los trámites, y sólo cuando ya no haga falta ahí me la envía. Creo que con esos papeles tiene usted todo lo necesario. Quizás usted mismo tendrá que llenar alguno de los casilleros que a mí se me haya pasado. Es absurdo que sea necesario renunciar al puesto para disponer de su propio dinero, como si lo uno tuviera mucho que ver con lo otro. Pero es la burocracia, y no hay más que hablar. Usted quizás sabrá que yo pedí originariamente, por conducto de Gullón, que transfirieran esos fondos a la Asociación oficial de profesores donde ahora estoy cotizando, con lo cual, si alguna vez volvía a enseñar en la UPR, podría transferir de nuevo, aumentados, los fondos a donde ahora están. Eso parecía lógico, hacedero y conveniente. Dijeron que no. El único procedimiento es renunciar. Bueno.

Sabe cuánto le agradezco las molestias que se está tomando. Sé que son grandes, y muchas; pero sé también que sin ellas no andaría el carro ni patrás ni palante. Así es que…

Escriba.

Y reciban ustedes nuestros más cordiales abrazos.

Ayala.-


FECHA
03/05/1960
REMITENTE
Jorge Enjuto
DESTINATARIOS/AS
Francisco Ayala
DESTINO
54 West 16th Street. Apt. 4F. New York 11 N. Y.
ORIGEN
S.l.
FICHA DESCRIPTIVA

[Carta mecanografiada]

DEPÓSITO DEL ORIGINAL
Fondo Jaime Benítez. Universidad de Puerto Rico

Carta de Jorge Enjuto a Francisco Ayala (03/05/1960)

3 de mayo de 1960

Sr. Francisco Ayala

54 W. 16th Street

New York 11, N.Y.

Querido Paco:

He recibido su carta del 25 de abril y como había estado esperando poder dar noticias sobre la cuestión de la devolución de sus dineros, he venido retrasando la contestación hasta la fecha. Todo está en marcha con la recomendación de que, de ser humanamente posible, se le envíen a usted los ahorros, tanto de la Asociación como de la Junta de Retiro, a mediados de este mes. En los próximos días volveré a tocar el asunto para ver si la promesa puede cumplirse.

En cuanto al artículo de Molina, el mismo día que recibí su carta hablé con Fernández Méndez, pues supuse, no sin razón, que la mejora táctica era enfrentar la situación directamente. Me prometió que este artículo en su última versión, que ya obra en poder de la Editorial, sería publicado en el próximo número. Hay que considerar, naturalmente, que el número que debió haber salido en homenaje a Palés Matos es doble, y en consecuencia, habrán de pasar seis meses antes de que la revista a que Fernández Méndez se refería, haga su aparición.

Aurorita sigue pensando en su viaje para fines de mayo o principios de junio. Me dio la dirección de mis tías para enviársela a ustedes, pero se me olvidó en casa y prefiero que ésta salga, aunque no la lleve. Antes de que se marche les escribiré enviándoles ésa u otra que se tercie.

Nilita ha estado de lo más rotativa y espectacular en estas últimas semanas en las que hizo un viaje a Venezuela, entre otras cosas, para asistir a un congreso en que se acordó la conveniencia de exigir la futura soberanía de Puerto Rico. Presumo que Nilita algo habrá tenido que ver con esta moción. Arturo Morales Carrión también se encontraba en dicho congreso, paro aparentemente, según las descripciones del cuarto poder, no tomó nada bien este revés político. En estos momentos, don Jaime se encuentra en Nueva York desde el domingo con el objeto de asistir a una de esas conferencias que con tanta asiduidad celebran las Universidades Norteamericanas. Supongo que si tiene algún tiempo libre habrá de comunicarse con ustedes para charlar un rato. En cuanto al viaje a Berlín no tengo la menor esperanza de visitar en el futuro próximo este problemático foco de guerra templada.

Mi trabajado y despreciado artículo sigue durmiendo el sueño de los justos. Ahora que Nilita está de regreso y de buen humor, supongo, venceré mi natural timidez y le tocaré el tema. Si no veo las cosas muy claras, lo mandaré a alguna otra revista para ver si algún día puede asomarse a los ojos de aquellos lectores picados de curiosidad.

Con los mejores recuerdos de Aurorita para todos y los míos de paso, reciban un fuerte abrazo de este amigo que de veras les aprecia,

Jorge

eigo