Las cartas de Francisco Ayala sobre

José M.ª Ferrater Mora

José María Ferrater Mora. Barcelona, 1912-1991.

Autor del Diccionario de Filosofía que Ayala consideraba en sus memorias “el mejor de cuantos existen hoy en cualquier idioma”, dejó una extensa obra filosófica y literaria.


Ayala y Ferrater se conocieron personalmente en Buenos Aires, cuando la correspondencia entre ambos ya había comenzado. Ferrater desarrolló una larga labor de docencia e investigación en el Bryn Mawr College de Pensilvania, a cuya plantilla consiguió incorporar de forma permanente a Francisco Ayala en 1959.

cartas 6 al 10 de 17
FECHA
12/10/1958
REMITENTE
Francisco Ayala
DESTINATARIOS/AS
Vicente Llorens
DESTINO
S.l.
ORIGEN
Rutgers University
FICHA DESCRIPTIVA

[Carta mecanografiada con firma autógrafa y con membrete:] RUTGERS, THE STATE UNIVERSITY / DEPARTMENT OF ROMANCE LANGUAGES / NEW BRUNSWICK, NEW JERSEY

DEPÓSITO DEL ORIGINAL
Biblioteca Valenciana Nicolau Primitiu. Archivo Vicente Llorens

Carta de Francisco Ayala a Vicente Llorens (12/10/1958)

12 de octubre de 1958.

Querido Vicente: No dirás que tardo en contestarte. Pero tanta diligencia tiene esta vez un motivo interesado. Me preguntas qué hay de J. Hopkins. El mismo dia que recibí tu carta, me llegó otra del chairman, Nathan Edelman, preguntándome si estaría interesado, para, en caso, entablar conversaciones. Ayer, cambiando impresiones con Ferrater, que ha intervenido en el asunto, conjeturábamos si tú habrias pedido a Singleton que me recomendara. Suponemos que sí, y que eso, junto con la sugestión hecha por Willis, está en el origen de la invitación de principio; pero si no lo hubieras hecho, sería muy util que enseguida le escribieras, ya que Edelman, sin duda, lo aprecia mucho. (En efecto, menciona en su carta, por cierto muy atenta, la labor que Singleton está haciendo; y esa alusión me hace suponer que habrá intervenido a favor mio).

En Rutgers me tratan bien, y estoy contento; cualquier queja sería injusta. Lo único que no pudo resolverse a satisfacción fué la cuestión de vivienda; de modo que hemos tomado un departamento en Manhattan (apunta: 54 W., 16th St., apt. 4F), y yo voy tres veces a la semana a dar las clases.

Tienes razón, que no importa lo que alargue tu trabajo el nuevo material descubierto. Al contrario, tanto mejor, puesto que ese material te permitirá “contruir” la figura de Blanco en un modo cabal. Esa figura, tal como tú la presentes, va a ser muy reveladora del famoso enigma español que a todos nos tiene chingados.

Me alegro de que te dispongas a la experiencia agridulce de revisitar los lugares de la ay ya fugaz, si no fugada, juventud. Recuperarás con el sentimiento lo que de ella te quede, y con los ojos lo que quede de las viejas ciudades. Verás –espero– que es más, en ambos casos, de lo que uno pensaba. Lo digo, porque yo he tenido experiencias análogas, y sólo me falta la que más temo, y deseo: volver a Granada, donde nací, pero donde no he estado desde que tenía 16 años.

No puedes imaginarte cuanto me ha agradado el saber que leiste mi novela, y que te ha parecido bien. La aprobación de los pocos amigos cuyo juicio importa es, hoy por hoy, el único gaje del trabajo literario. Muchas gracias por lo que me dices.

Puesto que vas a andar con Clavería, no dejes de darle mis saludos afectuosos.

Recíbelos tú de Nina, y un abrazo de tu amigo

Ayala.-


FECHA
06/12/1958
REMITENTE
Francisco Ayala
DESTINATARIOS/AS
Vicente Llorens
DESTINO
S.l.
ORIGEN
Rutgers University
FICHA DESCRIPTIVA

[Carta mecanografiada con firma autógrafa y con membrete:] RUTGERS UNIVERSITY / The State University of New Jersey / INTERDEPARTMENT COMMUNICATION

DEPÓSITO DEL ORIGINAL
Biblioteca Valenciana Nicolau Primitiu. Archivo Vicente Llorens

Carta de Francisco Ayala a Vicente Llorens (06/12/1958)

6 de diciembre de 1958.

Querido Vicente:

Próximas las consabidas navidades y, por lo tanto, también tu regreso a España, si es que no estás ya en ella, ahí te dirijo unas lineas, con las pocas noticias de nuestra vida y parvos milagros.

En lo personal: la cuestión de J. Hopkins sigue en veremos, con todos los tramites, consultas, deliberaciones y tribulaciones del caso. Según parece vacilan entre la candidatura de Anderson Imbert y la mia. Hasta el momento no ha habido sino palabras amables, nada de ofrecimiento concreto. Entre tanto, el amigo Ferrater me trae el ofrecimiento de Bryn Mawr: hasta el momento, no sé tampoco si las condiciones que me proponen son ventajosas respecto a las que va a ofrecerme Rutgers. Todo ello habrá de decidirse en las semanas próximas, supongo. Veremos, dijo el ciego.

Otra cosa: la Princeton University Press, o sea el Sr. Bailey Jr., me escribió lamentando no haberme conocido durante mi estada ahí, y proponiendome una biografía intelectual de Ortega –eso, a base de una reseña que hice en la American Sociological Review sobre una traducción inglesa de El hombre y la gente. Hemos entrado en negociaciones, y puede ser que eso resulte, pues la idea me parece estimulante.

Y eso es todo, pues no tenemos contratiempos de salud de que quejarnos, ni nos ha tocado la lotería, ni se ha producido ningún evento memorable en nuestra gris existencia. Por ende, queda clausurada la sección de acontecimientos personales, y pasamos a la esfera de los públicos, nacionales e internacionales. El más destacado de todos, durante la última temporada, es que a Jaime Benitez lo nombró CIUDADANO DEL AÑO el Instituto neoyorkino de Cultura Puertorriqueña (si es que así se llama la Institución); con oportunidad de lo cual tuvimos al matrimonio en esta gran urbe durante quince ajetreados dias, y disfrutamos de una fiesta con discursos abundantes y floridos, plus canciones por varios artistas del ambiente. Et c’est tout.

Termino, dándote la dirección y teléfono nuestro en Nueva York (no recuerdo si ya te los di en carta anterior), de modo que, si no escribes antes, como espero y deseo, al menos telefonees no bien tu planta huelle esta tierra de libertad y perros calientes.

Saludos, y un gran abrazo de

Ayala.-

54W., 16th Street, Apt. 4F (Tel. WA9-3193)


FECHA
22/01/1959
REMITENTE
Francisco Ayala
DESTINATARIOS/AS
Ignacio Iglesias
DESTINO
S.l.
ORIGEN
S.l.
FICHA DESCRIPTIVA

[Carta mecanografiada con firma autógrafa y con membrete:] RUTGERS UNIVERSITY / The State University of New Jersey / INTERDEPARTMENT COMMUNICATION

DEPÓSITO DEL ORIGINAL
Colección Ignacio Iglesias Suárez. Archivo y Biblioteca de la Fundación Pablo Iglesias (Alcalá de Henares, Madrid)

Carta de Francisco Ayala a Ignacio Iglesias (22/01/1959)

22 de enero de 1959.

Mi querido Iglesias:

Mil gracias por la atención que ha prestado a mi novela Muertes de perro. La reseña suya, que acabo de leer, es una de las más lúcidas entre los muchos artículos que ya han salido comentando ese libro. Me parece, sobre todo, un gran acierto el que usted, a diferencia de otros críticos que escinden mis escritos en dos sectores incomunicados, el literario y el –digámoslo así– científico, apunte a la unidad esencial de mi producción. En efecto, la novela presenta desde el lado de la humanidad concreta los mismos problemas que en términos generales y abstractos he tratado en otros libros. Y esto es lo que, en general, pasan por alto los críticos, quienes, o bien se atienen al aspecto político, haciendo hincapié en la sátira contra la dictadura (J. L. Cano, en Insula, termina exhortando a la lectura, sin duda para el efecto de carambola), o bien consideran los aspectos literarios, técnicos, estilísticos, etc. Lo que hay debajo de las dictaduras (y que usted lo alude, al mostrar que una sucede a otra sobre el mismo ambiente), eso suele pasarse por alto. Y creo que no a causa de escasa atención, sino más bien por una especie de embarazo que a todos nos paraliza cuando se trata de reconocer el mal en que nosotros mismos estamos envueltos. Fundamentalmente, la novela es una diatriba, en todos los tonos, pero particularmente en el del sarcasmo, contra el nacionalismo; y si uno es enemigo de las dictaduras, pero comparte los sentimientos nacionalistas donde éstas arraigan, se sentirá tentado a aplaudir la sátira contra el dictador, y a omitir la sátira contra la situación básica que lo produce.

Pero el libro se está leyendo, y se está comentando, aunque casi siempre de soslayo, y yo creo que no será un libro inutil, ni un libro más. He presenciado, en la Argentina, algunas de las reacciones que ha producido, otras me han llegado en forma de carta, y tengo la impresión de que quienes han captado su fondo todavía no se atreven a publicar los efectos del impacto recibido. Usted, querido Iglesias, no conoce Hispanoamérica, y no puede imaginarse la sensibilidad que existe entre la mejor juventud para este tipo de planteamientos. Ahora mismo, frente a lo que está pasando en Cuba, mi novela “vive”. Yo creo que, con todos sus amargores, es saludable medicina; precisamente, por tratarse de una novela, y no de un libro directamente combativo.

Hace unos pocos días me envió Hugo Rodriguez Alcalá copia de un excelente artículo que, según me dice, les ha remitido a ustedes por indicación de Ferrater Mora. El que sea un escritor americano (R. Alcalá es paraguayo) quien hace esos comentarios, y no un español, les añade significación y valor. Y los objetivos últimos de mi novela coinciden tan a fondo con los propósitos del Congreso, que ese artículo encajará, creo, admirablemente en las páginas de Cuadernos. Según me dice el autor, va a leerlo como ponencia en el próximo congreso de [sic] Instituto de Literatura Iberoamericana, aquí en Nueva York.

Dígale a Gorkin que no se olvide de dar señales de vida. Yo creo que a final de mayo voy a ir a Europa, y permanecer varios meses, hasta fines de setiembre, en relación con un trabajo que he de hacer para la universidad de Princeton; pero todavía no es seguro. Así es que probablemente nos veremos para entonces. Entre tanto, no deje de ponerme unas líneas, que yo soy buen corresponsal y contesto a las cartas.

Otra vez muchas gracias por su nota, y un gran abrazo de su amigo y compañero

Francisco Ayala.-

Francisco Ayala

Importante: haga tomar nota de mi actual dirección; a saber

54 W., 16th Street, Apt. 4F

NEW YORK 11, N. Y.


FECHA
30/04/1959
REMITENTE
Francisco Ayala
DESTINATARIOS/AS
Guillermo de Torre
DESTINO
Buenos Aires
ORIGEN
Rutgers University
FICHA DESCRIPTIVA

[Carta mecanografiada con firma autógrafa y con membrete:] FRANCISCO AYALA / 54 WEST 16TH STREET / APT. 4F / NEW YORK 11 N. Y.

DEPÓSITO DEL ORIGINAL
Biblioteca Nacional de España. Mss/22819/6

Carta de Francisco Ayala a Guillermo de Torre (30/04/1959)

30 de abril de 1959

Querido Guillermo:

Me entero por Angel de Rio de que andas proyectando una revista; y como al mismo tiempo tenemos aquí entre manos varios amigos (Ferrater, Lloréns, el mismo Angel, y otros) un proyecto semejante, se me ocurre que tal vez pudiéramos coordinar los esfuerzos e inciativas [sic], ya que en definitiva ha de tratarse de cosas muy semejantes, y cooperar a lo único que importa en estos casos, que es el resultado intelectual y moral (o, en un sentido más bien remoto e indirecto, político), puesto que desde el punto de vista empresa o negocio nadie puede ignorar que una revista es siempre pura pérdida. Por esto hay que recabar para publicarla un mecenazgo.

Nosotros nos hallamos todavía en las primeras fases del proyecto; por lo tanto, en un momento que consiente mucha flexibilidad. Por eso te hago esa sugestión; y espero tu respuesta.

Dale a Norah nuestros más afectuosos saludos, y recibe un gran abrazo de tu viejo amigo

Ayala.-


FECHA
25/08/1959
REMITENTE
Francisco Ayala
DESTINATARIOS/AS
Vicente Llorens
DESTINO
Sueca, 8. Valencia
ORIGEN
54 West 16th Street. Apt. 4F. New York 11 N. Y.
FICHA DESCRIPTIVA

[Carta mecanografiada con firma autógrafa]

DEPÓSITO DEL ORIGINAL
Biblioteca Valenciana Nicolau Primitiu. Archivo Vicente Llorens

Carta de Francisco Ayala a Vicente Llorens (25/08/1959)

25 de agosto de 1959

Querido Vicente:

No quiero vengarme de tu demora, o pereza, epistolar, y contesto enseguida, o casi, a tu carta, para que te alcance todavía en Valencia. Pero no creas que tengo demasiadas cosas que contarte, a menos que te diga que estamos pasando en Nueva York unas calores espantosos, después de haber tiritado por dos meses en el aire acondicionado de Puerto Rico, donde teníamos que salir a la calle de vez en cuando para entrar en calor. La Isla de la Simpatía sigue como siempre, lo cual no es poco decir. No lo hemos pasado mal, después de todo, aunque tengo la sensación de haber perdido uno de los ya seguramente no numerosos veranos que le quedan a uno por delante; esa misma sensación de fastidio que tiene uno cuando comprueba, después de haber entrado al cine, que ya había visto la película.

Estoy deseando oirte contar las cosas “serias” que prometes; tanto más, porque Ferrater me hace idéntida [sic] promesa como igual reserva. Pero también aguardo con impaciencia las “no serias”, tales como galardones de vástagas y majadaderías [sic] de progenitores, que también dejas adivinar con envidiable técnica del “suspense”; e igualmente, las impresiones de la vie littéraire madrilenne (si es así como se escribe).

Aquí, en la semana próxima, tendremos gran concurrencia de colegas procedentes del Fair West en el congreso del Instituto de Literatura Iberoamericana, o como se llames, que se reune en Columbia Univ. y Rutgers; de modo que estaremos más entretenidos de lo que, normalmente, hace falta. Supongo que para esos dias estará de vuelta Angelo Fluminensis, quien ahora se pasea por Buenos Aires, desde donde me llegan noticias (indirectas) de sus atracones, más que de sus conferencias.

Marichal no ha resollado de un encargo que le hice para que cumpliera una gestión en Madrid. Espero que no se le haya olvidado... Pero la esperanza es lo último que se pierde en este mundo.

Tengo una noticia: The Macmillan Co. me ha contratado Muertes de perro para publicarla en inglés. Veremos si hacen una traducción decente.

Dices que llegarás aquí el 20 de septiembre. Es probable que en esa fecha estemos en Nueva York; y es probable también que para el dia siguiente viaje yo hacia Filadelfia, en cuyo caso quizás podríamos seguir viaje juntos hasta Princeton. Llámame en cuanto llegues. Mi teléfono, por si no te acuerdas, es WA9-3193.

Y termino, con cariñosos saludos de Nina, y un fraternal abrazo de

Ayala.-