Correspondencia con Eduardo Mallea:

Eduardo Mallea

1903 Bahía Blanca - 1982 Buenos Aires

Además de escritor, traductor y periodista, Eduardo Mallea fue director del suplemento literario del diario La Nación de Buenos Aires, donde acogió las colaboraciones de Ayala desde su llegada al exilio. Pertenecía al grupo que promovió la revista Sur, y fue uno de los impulsores de Realidad. Revista de Ideas (1947-1949).

cartas 11 al 13 de 13
FECHA
23/11/1965
REMITENTE
Francisco Ayala
DESTINATARIOS/AS
Eduardo Mallea
DESTINO
S.l.
ORIGEN
S.l.
FICHA DESCRIPTIVA

[Carta mecanografiada con firma autógrafa]

DEPÓSITO DEL ORIGINAL
Archivo Eduardo Mallea

Carta de Francisco Ayala a Eduardo Mallea (23/11/1965)

23 de noviembre de 1965

Mi querido Eduardo:

Llegó tu postal con las cordiales lineas en que das testimonio de tu recuerdo amistoso.

Sabiendo yo por Victoria, quien ha estado aquí con Angélica hasta hace un par de dias, que te proponías pasar por España, encargué a Ortega que te diera mis saludos. No sé si lo haría así, pero esos amigos me escriben muy complacidos de haber estado contigo. ¡Cuánto me gustaría conocer tus impresiones de ese viaje! Supongo que habrás tenido quizás tiempo de leer esa especie de mise au point sobre España que editó hace unos meses Sur (y que, como alguna que otra de mis cosas últimas, no te he enviado con dedicatoria, en este caso porque me parecía tonto hacerle hacer al libro un viaje de ida y vuelta, ya que cuanto yo escribo está dedicado a tí como el lector ideal a que puede aspirar uno, mientras que en otro caso, como un ensayo aparecido en Revista de Occidente, porque te llegaría la separata mucho después de haber tenido ocasión de leerlo en la revista misma.) Pero, volviendo a lo que te decía, me gustaría muchísimo poder confrontar impresiones, y eso con la calma y holgura que la conversación permite y está vedada en cambio a la comunicación epistolar, precaria siempre, y más cuando se vive, como vivo yo ahora, en un torbellino de obligaciones de trabajo que no sé ni cómo han caido sobre mí, y que me tienen absorbido –o mejor dicho, distraido, pues son majaderías superficiales y me sacan de lo que más importa en un tiempo en que ya uno cuenta con poco para hacer aquello que más le importa. Pero…

En esta semana anuncia su llegada Murena, y lo aguardo con deseo de ver si es posible que su permanencia aquí le sea grata. Va a quedarse muy pocos dias, quizás sólo quince, y de ellos no más de una semana en Nueva York.

Yo estoy pasando ahora momentos un poco difíciles en lo que se refiere a mi estado de ánimo y a mi relación con la obra que, por vocación o destino, pienso me correspondía haber hecho. En lo externo, todo marcha regularmente, es decir, no mal; pero la reflexión sobre el sentido o sinsentido de la propia existencia planea siempre por encima de las ocupaciones concretas, con sus posibles y sus imposibles.

Bueno, si tienes ganas y humor, escríbeme.

Nuestros más cariñosos saludos para ustedes y a tí un fuerte abrazo de

Ayala.-


FECHA
15/03/1966
REMITENTE
Francisco Ayala
DESTINATARIOS/AS
Eduardo Mallea
DESTINO
S.l.
ORIGEN
S.l.
FICHA DESCRIPTIVA

[Carta mecanografiada con firma autógrafa y con membrete:] NEW YORK UNIVERSITY / GRADUATE SCHOOL OF ARTS AND SCIENCE / WASHINGTON SQUARE, NEW YORK 3, N.Y.

DEPÓSITO DEL ORIGINAL
Archivo Eduardo Mallea

Carta de Francisco Ayala a Eduardo Mallea (15/03/1966)

Mi querido Eduardo:

Vino a casa y entregó a Nina (pues yo estaba ausente) tu carta y libro el joven César Magrini, a quien llamé luego por teléfono y quedamos en que vendría a vernos ayer lunes, después de un viaje que iba a hacer por Nueva Inglaterra. No vino, ni tampoco llamó por teléfono. Sentiría que se hubiera marchado ya sin haber tenido ocasión de conocerlo personalmente.

Te agradezco muchísimo el regalo del libro, que ya conocía a través de esa mujer infatigablemente ocupada en estudiar tu obra para su tésis doctoral. Temo –quede ello inter nos–, y ya habrás podido darte cuenta conversando con ella, que los esfuerzos de esta dama no van a contribuir demasiado a poner de relieve tus méritos literarios. Veremos.

En cuanto a Poderío de la novela, me parece una obra de interés extraordinario, no sólo por su valor intrínseco, que –no hay que decirlo– es muy alto, como por su función iluminadora, al proyectar luz sobre el conjunto de tus escritos anteriores. Mucho me gustaría que el amigo López Llausás me enviara un ejemplar de El resentimiento tan pronto como salga de prensa. Aquí podría adquirirlo yo, pero tardan bastante en llegar a librería en Nueva York los libros de procedencia argentina.

De nosotros, las novedades no son sensacionales. Hice una escapada a Madrid para arreglar varias cuestiones de orden editorial que estaban medio empantanadas, y regresé con la impresión de que no resultó vana mi ida. Los frutos, bajo forma de reimpresiones, no tardarán en cosecharse… creo. Y en mayo, lo menos al final que mis obligaciones docentes consientan, iremos a Italia, donde acaba de salir la traducción de El fondo del vaso después de Muertes de perro que, al parecer, se vendió muy bien, y todavía será tiempo de que me hagan alguna de esas interviews que los editores preparan a veces para promover la venta de sus libros. De ahí pasaremos a España, para dar otro empujón a los libros que se preparan, y regresaremos a Nueva York en julio, a tiempo de asistir al nacimiento de nuestro primer nieto, que se anuncia para esas fechas.

Quien, procedente de Buenos Aires, estuvo ayer en casa a verme fue mi antiguo y excelente amigo Ernesto Garzón. Con él hablamos mucho de ese ambiente, y de varias de las alimañas que pululan por la gran urbe.

Rodríguez Alcalá me escribe diciendo que ha mandado un ensayo analizando un cuento mio a un concurso de La Nación. Dios le asista; pues a juzgar por los antecedentes… ¡Bueno!

En fin, termino. Nina envía sus más cariñosos saludos para ustedes dos, y yo un grande y cordial abrazo

Ayala.-


FECHA
30/12/1968
REMITENTE
Francisco Ayala
DESTINATARIOS/AS
Eduardo Mallea
DESTINO
S.l.
ORIGEN
Nueva York
FICHA DESCRIPTIVA

[Carta mecanografiada con firma autógrafa y con membrete:] THE UNIVERSITY OF CHICAGO / CHICAGO 37. ILLINOIS / DEPARTMENT OF ROMANCE LANGUAGES AND LITERATURES / 1050 EAST 59TH STREET

DEPÓSITO DEL ORIGINAL
Archivo Eduardo Mallea

Carta de Francisco Ayala a Eduardo Mallea (30/12/1968)

Nueva York, 30 de diciembre 1968

Mi querido Eduardo: Antes de que el año termine quiero contestar a tu carta y desearles toda clase de aventuras para el próximo, según es la costumbre, y según corresponde a mis verdaderos sentimientos.

Recibí, en efecto la carta de Hornos Paz, y le contesté tan pronto como me fue posible (no de inmediato, porque esta última temporada ha sido de muchísimo trabajo para mí). Le agradecía la invitación, y le decía que, teniendo el propósito, como lo tengo, de ir a Buenos Aires por algunos dias dentro del año próximo, podríamos entonces hablar sobre los términos en que tendría efecto mi colaboración (que –le advertía– no puede ser demasiado frecuente), a menos que él tenga alguna idea y quiera escribirme, en cuyo caso podríamos quizá ponernos de acuerdo desde ahora.

Mi viaje a Buenos Aires será sobre la base una invitación de la universidad de La Plata, y creo que lo haré, yendo desde Madrid, a principios de Agosto, –por más que uno nunca sabe cómo estarán las cosas, aquí, ahí, y en todas partes, de aquí a esas fechas; pero el propósito es ése. Y te diré que me seduce bastante la idea de volver a estar en Buenos Aires una temporadita, aunque sea breve.

Me da envidia leer en tu carta que estás lleno de proyectos, y que te aplicas a ellos, pues por mi parte yo estoy en un momento de gran desconcierto y en una ebullición interior que quizá dé algo de sí, pero que temo pueda no ser en modo alguno creadora. Tanto viajar es quizá (y fíjate cuánto repito esta palabra) el síntoma de la inquietud en que, espiritualmente, me encuentro. Digo “tanto viajar” porque, aparte mi travesía aérea frecuente entre Chicago y Nueva York, el mes que viene iré a Puerto Rico, luego pasaré el de febrero en California, en marzo iré, creo, a España, para regresar en seguida a Chicago; y luego en junio otra vez a Europa, de ahí a Buenos Aires, y qué sé yo. Bueno.

Espero tu nuevo libro con el interés de siempre, que es mucho, pues ya sabes cuánto me gusta tu obra, y con qué placer la veo completarse de manera tan armónica y feliz. Es sano que pienses siempre en la novela “salvadora”, y no sería buena señal la complacencia en lo hecho; pero créeme: estás salvado, aunque nunca escribas la segunda parte de la Galatea.

Nuestros cariños a los dos, y un gran abrazo de

Ayala.-